No está siendo del agrado de los usuarios la nueva política de Microsoft en este sentido. Hablamos de que, varios parches recientes aplicados a Windows 7 y Windows 8, están especialmente diseñados para saber más sobre los usuarios, en cuanto al uso que se hace del sistema operativo. Y no encaja con la política de distribución de software gratis, donde Windows 10 sí tiene justificado este punto, puesto que los usuarios de Windows 7 y Windows 8 sí han pagado por una licencia, luego no se puede justificar como moneda de cambio.

Explicando que sólo se aplica esta recopilación de información a los usuarios suscritos al programa de apoyo correspondiente, Microsoft ha querido defenderse esta última semana de las acusaciones, pero al mismo tiempo están dejando ver esta nueva cara, ciertamente oscura, en otros movimientos que también tienen que ver con Windows 7 y Windows 8. El usuario está tomando un papel secundario en el software de Microsoft, al menos en su derecho, si podemos considerarlo así, a ser informado sobre los cambios.

Las actualizaciones más recientes en Windows 7 la versión posterior, como podéis ver en la anterior captura de pantalla, simplemente especifican que “resuelve problemas en Windows”, pero no se aporta un changelog o registro de cambios como tal, en el que el usuario debería tener disponible todo el detalle de las modificaciones que se aplican con este parche. Porque, como ya sabréis, podemos optar por la no instalación de los parches.

En los diferentes foros que Microsoft mantiene en su portal web, los usuarios están dejando sus quejas en contra de este nuevo planteamiento. Sin duda, un punto de reflexión la opacidad de Microsoft que, aunque son dos hechos paralelos, coincide con un mayor hincapié en la recolección de información de sus usuarios. Poco sentido tiene.

Quizá también te pueda interesar…

 

Fuente: Softpedia | adslzone