Éxito indiscutible de Xiaomi
La marca china está de moda, si extrapolamos su evolución en España a otros países no cabe duda que la firma especializada en teléfonos y otros dispositivos ha conseguido calar entre la opinión pública sin necesidad de acometer grandes esfuerzos a nivel de marketing. Todavía recuerdo cuando comprar un Xiaomi en España era algo exótico, había que pedirlo a China, rezar para no tener problemas en la aduana o en la tienda de turno y si todo salía bien, tenías un teléfono espectacular que costaba la mitad que sus homólogos de otras marcas. Un ritual para muchos fans de la tecnología que ha permitido a la marca contar con un séquito de seguidores dispuestos a esperar colas o a hablar bondades de sus productos en las redes sociales sin recibir nada a cambio. De momento, los números acompañan en lo que se refiere a cuota de mercado, en España son terceros y están comiendo claramente la tostada a Samsung y Huawei. Incluso pueden presumir de haber superado a Apple en nuestro país, aunque eso tampoco tiene demasiado mérito porque la firma de la manzana siempre ha tenido una cuota de mercado paupérrima si lo comparamos con Reino Unido, Estados Unidos u otros países importantes.
¿Qué ofrece Xiaomi?
Además de teléfonos de diferentes gamas a precio asequible, la compañía cuenta con todo tipo de dispositivos que lejos de ofrecer un gran margen, permiten a la firma calar entre los usuarios que son fieles seguidores. Podemos encontrar bicicletas eléctricas,, tazas de váter inteligentes, routers, microondas, ventiladores, monopatines eléctricos, ratones, portátiles, cámaras de seguridad, drones, wearables… etc. Una factoría de gadgets y productos para el hogar que a precio económico alimentan el hype de los fans.
Salida a bolsa
El estreno de Xiaomi en el parqué de Hong Kong en los próximos días dará lugar al mayor estreno bursátil en dos años, todo un acontecimiento para analistas financieros como para los fans de la tecnología que podrán comprar “un pedacito” de la compañía para formar parte del proyecto y de paso para ganar o perder dinero. ¿Conviene dar el paso?
Muchos de los que me seguís en Instagram habéis visto que la bolsa es una de mis pasiones y llevo siguiendo de cerca a Xiaomi y otras compañías chinas. De hecho no tengo problema en reconocer que invierto en empresas asiáticas que cotizan en el Nasdaq como Huya, dedicada al streaming de videojuegos o Iqiyi, que está considerado como el Netflix chino.
De momento las noticias que llegan sobre Xiaomi no son buenas, la empresa ha fijado la valoración de salida a bolsa en 4.700 millones de dólares lo que supone el mínimo de lo que buscaban. Los analistas no se creían los números y por ello hemos pasado de unas expectativas de valoración de 100.000 millones de dólares a prácticamente la mitad. La empresa debutará en los mercados con una valoración de 54.000 millones. ¿Conviene o no entrar?
En primer lugar hay que decir que no es lo mismo comprar acciones de una compañía de Nasdaq o europea que en mercados asiáticos, las comisiones son elevadísimas y además los tipos de cambio pueden jugar una mala pasada. Recuerdo durante el lanzamiento de Pokémon Go que compré acciones de Nintendo a través de mi banco, y a pesar de ganarle a la acción un 30% en apenas unos días, a la hora de vender llegó a mi cuenta apenas un 5% de rentabilidad. Si nos ponemos a analizar Xiaomi son más sombras que luces las que nos encontramos.
Imagen de xataka
Copia de Apple
La firma asiática tiene obsesión con la tecnológica más potente del mundo. Copian el diseño de sus teléfonos, copian las Apple Stores, (incluso su ubicación). En Madrid por ejemplo han abierto en la Puerta del Sol junto a Apple, también en Xanadú… están preparando la apertura en Parquesur… no sería raro que también abrieran en el Gran Plaza 2 o en la Plaza de Cataluña en Barcelona. El plagio es tan evidente que en las propias keynotes siguen el mismo esquema de Apple, utilizan las mismas tipografías , vestimenta y no dudan en copiar frases míticas como el “One More Thing”.
Algo que quizás desconocéis pero no menos importante tiene que ver con la relación con los retailers y operadores. Fuentes de diferentes compañías nos confirman que Xiaomi también tiene esa arrogancia de Apple a la hora de negociar condiciones. En las tiendas se niega por ejemplo a pagar promotores cuando el resto de marcas sí lo hace o con los operadores se niega a invertir en comunicación para apoyar productos. Para evitar extenderme más en este sentido zanjaré el asunto criticando esa falta de innovación a la hora de diseñar productos. Personalmente me inspira poca confianza si hablamos de colocar mi dinero. Prefiero invertir en una compañía innovadora que tiene todo el camino por recorrer antes que en una empresa que crece en ventas copiando a los demás, tirando los márgenes y perdiendo dinero a espuertas.
Precisamente ese tema es el más peliagudo, la compañía ha reconocido que los márgenes que manejan se acercan al precio de coste, es decir, apenas ganan dinero con los teléfonos que es donde realmente son fuertes. Si nos fijamos en las cuentas, Xiaomi registró pérdidas de 928 millones de euros en el primer trimestre de 2018. El año pasado tampoco fue mejor, la empresa perdió nada menos que 5805 millones de euros. ¿Significa que en bolsa no van a subir? Ni mucho menos, obviamente los inversores quieren que las empresas ganen dinero, como por ejemplo Tesla que encadena muchos trimestres en pérdidas pero sigue escalando en los mercados. El secreto está en el grado de innovación, en la capacidad de generar dinero y en la credibilidad financiera.
¿Compramos o no?
De momento mi apuesta pasa por esperar, no creo en las copias chinas a pesar de que los productos me puedan llegar a entusiasmar. Hablando desde un punto de vista estrictamente financiero, es más razonable esperar y ver cómo se va pintando el gráfico antes que invertir en la compañía. También me preocupa su estrategia de disparar en todos los frentes sin importar el dinero, y la relación con proveedores que como dicen entre bambalinas… “les están esperando”. Si por algún casual Xiaomi sufre un “antenagate” como Apple o un “incendio” como le sucedió a Samsung con el Note 7, la empresa lo tendrá muy pero que muy difícil reponerse.
Fuente: adslzone
