Justin fue detenido por sorpresa por la Policía, que acudió a su domicilio por clicar 22 “likes” en el Facebook de April, su ex novia. Para ser liberado después de la detención, el joven con la orden de alejamiento tuvo que pagar una multa de 5.000 dólares. En este sentido, el joven se defendió de las acusaciones alegando desconocer que los likes quebrantaban la orden de alejamiento.

Para entender mejor el caso, por otra parte, también tenemos que comentar que el joven Justin Bellanco se defendió de las acusaciones asegurando que nunca amenazó de esta forma a su ex pareja, y que la chica también le golpeó en una ocasión, ante lo cual él no quiso interponer una demanda.

En España no se ha dado ningún caso similar, pero en Estados Unidos ya hemos visto sentencias similares, e incluso otras más singulares todavía, relacionadas con Facebook y otras redes sociales. Aunque pueda resultar curioso, lo cierto es que la ley también tiene que adaptarse a los nuevos tiempos, y en las redes sociales es de sobra conocido que también existe acoso, bullying y otras formas de maltrato.

Como reflexión personal ante los hechos, después de haberse aplicado una orden de alejamiento, continuar con semejante persecución a través de las redes sociales es, evidentemente, un signo de obsesión por la otra persona. Ahora bien, cuando adoptamos una posición de víctima en este tipo de soluciones, también deberíamos protegernos aplicando los filtros de privacidad en Facebook y otras redes sociales.

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Fuente: Ars Technica | adslzone