El ex marido de Ellanora Baidoo no desapareció en ningún momento, pero sí tuvo la habilidad de dificultar cualquier tipo de comunicación. Para evitar que Ellanora se pusiera en contacto con él, dejó de tener una dirección reconocida en 2011 y cambió su móvil a la modalidad de prepago, de forma que no se vinculase su identidad a una dirección de facturación. Por otra parte, ningún vehículo está registrado a su nombre, y cualquier otra forma de localizarle había sido ocultada por el mismo, básicamente consiguió convertirse en “un fantasma cuya esposa pretendía el divorcio”.

Facebook, otra vez, se convierte en un cabo suelto

Curiosamente, recibimos de vez en cuando información de delincuentes que, creyendo que habían actuado sin dejar pista alguna, acaban siendo “cazados” gracias a la red social Facebook. En este caso nos encontramos con, simplemente, un marido que no quiere dejar de serlo bajo ninguna circunstancia. Ahora bien, la justicia estadounidense ha aprobado el divorcio a través de “un mensaje privado por Facebook”. En realidad no ha sido sólo un mensaje, sino “una vez a la semana durante tres semanas consecutivas, o bien hasta que recibiera respuesta”.

Como adelantábamos, no es la primera vez que Facebook termina siendo la herramienta para concluir un proceso legal, pero sí es la primera vez en que un divorcio se da de esta forma. Lo que queda claro después de este extraño caso es que, cada vez más, Internet complica las cosas a quienes, con “mala fe”, pretenden hacerse invisible ante los ojos de la Ley.

Quizá te pueda interesar…

 

Fuente: NY Daily News | adslzone

 

Compártelo. ¡Gracias!