Ríos de tinta se han escrito sobre el nuevo “wearable” de Apple teniendo en cuenta que ha llegado muy tarde con respecto a otros equipos de la competencia. ¿Funciona bien? ¿Qué tal la autonomía? ¿Sirve para algo? Lejos de entrar en un análisis pormenorizado de los materiales, diseño y posibilidades de futuro queremos ofrecerte una valoración objetiva del funcionamiento del equipo para que puedas decidir.

Bien acabado y diseño elegante

Empezando por la apariencia del reloj hay que decir que la versión sport es cómoda y compacta. A nivel estético la firma ha cuidado mucho los materiales y hay que decir que el uso de aluminio anodizado y cristal de zafiro es diferencial con respecto a otros competidores. En cualquier caso es imprescindible que si estás pensando en comprarlo te acerques por una Apple Store y lo veas en directo. A diferencia del iPhone donde el usuario llega a la tienda con la decisión de compra tomada, el reloj hay que probarlo y sobre todo verlo puesto en la muñeca.

Uso y funciones

Vamos con lo realmente importante que es el uso y la utilidad que puede llegar a ofrecernos. En otros medios leerás párrafos enteros sobre la obra maestra que ha creado Apple y cómo el Watch se ha convertido en el gadget más íntimo creado hasta la fecha, también leerás cantidad de especulaciones sobre las posibilidades de futuro (pagos a través del reloj, mando a distancia, control de accesos..) la realidad es que a día de hoy sirve para bastante poco, sobre todo si lo comparamos con otros relojes inteligentes que sí cuentan con funciones interesantes como por ejemplo la capacidad de no depender de un smartphone.

Probando las apps nativas

Twitter, Instagram, La Caixa, Hipchat, Hailo.. son solo algunas de las aplicaciones que he estado probando y las sensaciones son agridulces por dos sencillas razones. Si utilizamos aplicaciones nativas de Apple el resultado es estupendo, están correctamente implementadas y podemos sacarle partido (con algunos matices que comentaré a continuación). En el caso de las apps remotas la experiencia deja bastante que desear… tardan en cargar y no están adaptadas al dispositivo. De hecho algunas son muy poco intuitivas y ni si quiera un usuario avanzado es capaz de adivinar cómo funcionan a la primera de cambio.

¿Y realmente sirve para algo?

Sinceramente, no me veo tuiteando desde el reloj, más que nada porque es incómodo y cerca tengo un iPhone a mano. Puede que tenga sentido desentenderse del teléfono y estar atento a las notificaciones, pero a día de hoy me aporta bastante poco en ese sentido. El correo también podemos leerlo desde el reloj pero cuando se trata de un mensaje largo se hace bastante incómodo.

Otras apps como Telegram tampoco es que estén muy logradas, basta una simple imagen para comprobar que solo se puede responder con frases preconfiguradas y que la interfaz no es nada del otro mundo. Whatsapp (que todavía no está disponible) debe hacer un excelente trabajo si de verdad quiere conquistar a los “watcheros” de Apple. En cuanto a otros widgets como el tiempo, los mapas o los relacionados con la salud están bien implementados pero tampoco lucen como se espera de un dispositivo que ha tenido dos años de ventaja con respecto a sus rivales.

Otros puntos negativos a tener en cuenta tienen que ver con la función de desbloqueo al girar la muñeca que falla a veces y con Siri, el asistente de voz no funciona como en el iPhone o en el iPad. Si le pides que te cuente un chiste te contará que “el colmo de un Apple Watch es no poder rascarse teniendo manecillas” pero si le pides algo más específico te dirá que no te ha entendido.

Autonomía y precio

No vamos a desvelar nada que no hayan contado otros medios. 24 horas de autonomía (aunque depende del uso que hagas del reloj y del modelo) no son suficientes a pesar de que haya fanáticos que aseguren que lo más normal del mundo irse a dormir y dejar el equipo cargando en la mesita de noche. El precio tampoco es asequible. En España la versión sport más económica cuesta 419 euros, en Estados Unidos la misma versión sale por 350 dólares. El resto de versiones rondan los 700 euros mientras que los edition se disparan por encima de los 15.000 euros. Cuando veo las versiones más caras me recuerdan a los móviles Vertu que también tienen precios astronómicos y que están dirigidos a un target que prefiero no definir.

¿Merece la pena comprarlo?

Vimos algunas razones para no hacerlo y después de 24 horas de uso la verdad que lo más sensato es esperar a que la plataforma madure y el ecosistema de aplicaciones coja forma. En el futuro será un dispositivo que en el apartado de la salud ofrezca un sinfín de aplicaciones útiles, a día de hoy no hay nada diferencial con respecto a otros equipos más económicos. Otras funciones como la posibilidad de llamar por teléfono o responder mensajes sigo sin verlas, es algo que ya intentaron los tablets y que fracasó estrepitosamente.

Lo mejor

Como decía se trata de un dispositivo con muchísimo futuro pero habrá que esperar. A nivel de diseño y materiales es espectacular, la pantalla se ve perfectamente y en el apartado táctil también está un paso por encima de otros competidores. En definitiva, opiniones hay para todos los gustos pero la realidad es que Apple ha puesto demasiadas veces el listón altísimo y en esta ocasión necesita madurar.

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Fuente: adslzone