La ministra de Cultura sigue encerrada en su trinchera en defensa de su política pro derechos de autor y canon digital. A pesar de la obligatoriedad en la modificación del canon y el compromiso del Gobierno a hacerlo en un plazo de tres meses que expiró a comienzos del presente mes de junio, Sinde ha defendido con vehemencia que se haya visto retrasado este compromiso.

"A veces hay que retrasar los plazos establecios", señaló, porque en su opinión "es mejor una buena ley retrasada, que una mala ley puntual", en declaraciones recogidas por Europa Press. Sin pedir disculpas por faltar a la palabra, prosiguió con su argumentación advirtiendo que "no es infrecuente en ninguna administración". Asimismo, volvió a recurrir al infantil "y tú más" al indicar que este tipo de retrasos y promesas incumplidas se hacen desde "cualquier color político".

Igualmente, la ministra aseguró que "la mayor parte de las veces ocurre por mera responsabilidad" y señaló que el Gobierno ha trabajado con "hiperactividad" y "perfeccionismo" en este asunto "que es de la máxima sensibilidad social".

Entre los motivos por los que se ha visto retrasada la modificación del canon está la ausencia de "conformidad de la Unión Europea" a las "líneas de actuación" configuradas por el Gobierno. Recordemos que desde el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, en octubre de 2010 se sentenció que la actual regulación del canon ha de ser modificada al suponer un abuso y aplicarse indiscriminadamente sobre las empresas e instituciones.

Lejos de proceder con la celeridad necesaria para cortar el abuso, el Gobierno sigue insistiendo en los "conceptos inseparables" que suponen el canon y el derecho de copia privada. "Suprimir el canon significa suprimir el derecho de los ciudadanos a hacer copias privadas. Si es eso lo que ustedes quieren, dígalo con claridad", afirmó en defensa a las críticas recibidas desde la oposición.

 

Fuente: adslzone