La Administración Federal de Aviación (FAA), encargada de asegurar la seguridad y fiabilidad de las operaciones aéreas y del espacio aéreo en Estados Unidos, completó ayer, 3 de septiembre de 2025, una revisión ambiental de los cohetes reutilizables Falcon 9 de SpaceX. En el comunicado compartido por los reguladores, señalan que no se encontró «ningún impacto significativo» en la calidad del medio ambiente humano. Con los resultados obtenidos, dan permiso a SpaceX para que amplíen la cantidad de vuelos de su cohete.
¿Cuántos vuelos de Falcon 9 habrá?
Hasta ahora, SpaceX tenía el visto bueno para lanzar 50 cohetes Falcon 9 anuales. Esta cifra aumenta hasta los 120 lanzamientos como máximo tras la revisión ambiental de la FAA (más del doble permitido antes). Además, los reguladores también han aprobado una nueva zona de aterrizaje in situ.
En el informe de la FAA, dan permiso a SpaceX para que pueda albergar hasta 34 aterrizajes de propulsores al año. Esta es la parte reutilizable de la primera etapa de los cohetes Falcon 9; es decir, lo que la marca reacondiciona para volver a usar en futuros vuelos.
Para obtener esta licencia, SpaceX ha tenido que cumplir con medidas medioambientales. Por ejemplo, la obtención de permisos ambientales adicionales antes de la construcción de las nuevas instalaciones, el uso de iluminación respetuosa con las tortugas marinas para los lanzamientos nocturnos y llevar a cabo estudios previos a la construcción de las poblaciones de arrendajos y serpientes índigo del este, para garantizar la protección de la vida silvestre de Florida.
Otra revisión fundamental era el tema de la gestión del agua. Este aspecto dio lugar a controversia recientemente. Según señalaban grupos ambientalistas, las grandes cantidades de agua que se vertían en la plataforma de lanzamiento durante el despegue al absorber el calor y el sonido de los motores contaminaban el ambiente. En la investigación ambiental de la FAA, se llegó a la conclusión que era poco probable que las aguas residuales industriales del sistema de diluvio del Falcon 9 contaminasen aguas cercanas.
Un paso necesario para SpaceX
La aprobación de la FAA de que SpaceX pueda realizar más vuelos de su Falcon 9 era necesaria. Este modelo es el cohete más lanzado del mundo y tiene una larga lista de agencias y empresas que contratan sus servicios para llegar al espacio. La compañía tiene clientes comerciales y acuerdos con el Departamento de Defensa, con la NASA y con la ESA. Además, usan Falcon 9 para el lanzamiento de sus propios satélites de Internet Starlink.
Con el límite que los reguladores habían impuesto, era complicado llegar a satisfacer a todos sus clientes. Por ese motivo, el visto bueno para hacer volar hasta 120 cohetes al año era importante. Asimismo, tener una zona de aterrizaje que permita recuperar sus propulsores reutilizables también agiliza el proceso, puesto que SpaceX no tendrá que depender de aterrizarlos en el océano con ayuda de un barco dron.
Esta buena noticia para SpaceX se suma a los avances de su megacohete Starship, que el pasado 26 de agosto de 2025 completó con éxito el décimo vuelo de prueba. Después de dos intentos fallidos, la empresa aeroespacial enmendó sus errores y consiguió hacer pleno en «todos los objetivos principales». Según se pudo ver en su directo, el equipo logró simular el despliegue de satélites, reencendió un motor durante el vuelo y probaron la resistencia del escudo térmico. Todo esto sin que el vehículo explotase y con un amerizaje suave en el Océano Índico.
View of Starship landing burn and splashdown on Flight 10, made possible by SpaceX’s recovery team. Starship made it through reentry with intentionally missing tiles, completed maneuvers to intentionally stress its flaps, had visible damage to its aft skirt and flaps, and still… pic.twitter.com/QgcbPN8lY4
— SpaceX (@SpaceX) August 28, 2025
Fuente: Evaluación ambiental (EA) del Falcon SLC-40 de SpaceX | adslzone