La interfaz cerebro-computadora (BCI son sus silgas en inglés) de Neuralink está diseñada para que quienes la lleven puedan controlar algunas máquinas con la mente. Según el empresario Elon Musk, fundador de la firma, el implante está pensado para ayudar a personas con problemas psicomotrices, pero podría lanzarse al público general en un futuro.

Actualmente, el sistema está en fase de prueba con humanos, la cual empezó a principios de este año. El primer ensayo clínico se realizó en un paciente llamado Nolan Arbaugh, de 29 años, que quedó paralizado del cuello para abajo tras un accidente de buceo hace ocho años.

«Hay mucho trabajo por hacer, pero ya ha cambiado mi vida», asegura Arbaugh en un vídeo que han subido en la cuenta de X de Neuralink. En dicha publicación, también ha detallado como han sido los primeros meses con el implante.

El paciente tuvo que aprender a usar el implante

Según cuenta Arbaugh, la cirugía para añadir el chip a su cerebro fue «súper fácil». No obstante, subraya que tuvo que aprender a diferenciar entre «el movimiento imaginado» y el «intento de movimiento» para empezar a controlar un cursor en una pantalla. 

Elon Musk anunció que el primer humano en recibir el BCI de Neuralink (Nolan Arbaugh) lo hizo el 28 de enero y se estaba «recuperando bien». Sin embargo, las noticias de que el paciente podía mover un ratón de ordenador con la mente no comenzaron a llegar hasta el 20 de febrero, casi un mes más tarde.

Al principio, probaron Arbaugh menciona que, en las primeras pruebas, intentó mover su cuerpo en lugar de imaginárselo: «Mi mano derecha hacia la izquierda, la derecha hacia delante y hacia atrás». Cuando dominó esa diferenciación entre imaginar e intentar, le resultó más «intuitivo» el movimiento del cursor en la pantalla.

El paciente compara el uso del implante con Star Wars. «Básicamente, es como usar ‘La Fuerza’ con el cursor», menciona Armbach, haciendo referencia a los poderes telequinéticos de la franquicia.

Todo lo que se puede hacer con Neuralink

Con el paso del tiempo, el paciente ha conseguido hacer muchas más cosas que mover un ratón de PC. Según especifica en el vídeo, gracias al BCI, ha podido jugar al ajedrez y al juego Civilization VI, algo que creía imposible tras su accidente en buceo.

Antes del BCI, Arbaugh había probado otros dispositivos de asistencia, como barras bucales, pero ninguno de ellos se acercaba a lo que le está proporcionando Neuralink.

Ahora, con el chip cerebral de Musk, el usuario aclara que puede tener libertad durante ocho horas. Según él, ese es el tiempo que tarda en agotarse la batería y, por lo tanto, tiene que ponerlo a cargar.

Sobre la carga, han hablado en el perfil de X en Neuralink. Sus desarrolladores están trabajando en una carga inalámbrica que, aunque actualmente muestre problemas, planean que sea «fácil, eficaz y segura».

A pesar de que asegure que el aparato de Neuralink le ha cambiado la vida, reconoce que todavía queda mucho camino por recorrer. «No es perfecto, yo diría que nos hemos topado con algunos problemas -detalla-. No quiero que la gente piense que este es el final del viaje. Hay mucho trabajo por hacer».

 

Fuente: adslzone