Ya sabes que todas las televisiones Smart son muy sensibles. No es lo mismo que si, cuando eras pequeño, limpiabas un televisor de tubo clásico. Hay que tener cuidado y, en especial, con los modelos QLED hay que ser especialmente sensibles, algo que también ocurre con otras propuestas como las Smart TV con tecnología QD OLED.

¿Qué necesitas?

Como vas a poder ver, lo que tienes que preparar antes de comenzar la limpieza y que, por otro lado, siempre te recomendamos tener a mano, no es nada especial. Se trata de herramientas que muy posiblemente ya tienes por casa y que, incluso, es posible que ya utilizases con otras televisiones o monitores. Así, lo primero que necesitas son los clásicos trapitos de microfibra para limpiar pantallas, siendo recomendable que sean de calidad para que no dejen pelos y que, además, tengan un tamaño moderado. Con paños demasiado grandes acabarás abarcando mucho espacio y lo cierto es que no aprovecharás toda su superficie de una forma práctica. Además, es conveniente que sean tres.

A esto también tienes que sumar una solución de limpieza que cuente con una composición que no resulte agresiva para tu televisión. Ni te dejes llevar por productos mágicos que te garanticen que tu Smart TV quedará perfecta al instante, ni tampoco recurras a toallitas húmedas, limpiacristales o cualquier otra cosa que se te pueda pasar por la cabeza. Tienes que ser muy cuidadoso con tu pantalla porque los modelos QLED tienen un alto índice de sensibilidad que debes proteger por todos los medios posibles.

El dato más importante de este líquido de limpieza se encuentra en la cantidad de etanol que incluya. Lo verás indicado en la ficha de producto y tendrás que fijarte en que el volumen de etanol sea del 70%. Esto es, al menos, lo que recomienda Samsung en su página, donde dicen que han probado más de 20 productos de limpieza hasta confirmar que el de 70% proporciona un mejor resultado.

Limpieza paso a paso

Ahora que ya tienes todo lo que necesitas, es el momento de comenzar a limpiar. Lo importante de este proceso es que, como te decíamos antes, seas cuidadoso. Si lo haces bien, conseguirás que la televisión vuelva a estar como nueva y que disfrutes de la mejor calidad de imagen posible.

Para empezar, desconecta la televisión de la electricidad. El motivo de ello es que, de esa forma, reducirás la carga electrostática, lo que te evitará problemas mientras estás limpiando. A continuación, utiliza uno de los paños de microfibra para retirar el polvo que pueda haber en la pantalla. Tienes que hacerlo con suavidad y siempre limpiando hacia la misma dirección. Las propiedades que tiene la microfibra ayudan a capturar el polvo sin que tengas que hacer ningún tipo de presión, así que tómatelo con calma. La intención es que quede lo más limpia posible antes de que, en el siguiente paso, utilices el líquido de limpieza.

Ahora es el momento de usar ese producto y, gracias a ello, eliminar las huellas que han quedado de los dedos al tocar la pantalla. Y aunque te pueda sorprender, es muy habitual que dejemos las huellas de los dedos o el aceite que sale de nuestras manos, porque tocamos la televisión más de lo que deberíamos. En ocasiones es para moverla un poco y tener más acceso a la parte trasera donde, por ejemplo, se encuentran las conexiones HDMI. Otras veces es por motivos adicionales, pero la cuestión es que siempre hay algún dedo o resto que deberíamos limpiar.

Para ello, pon el líquido de limpieza en otro de los paños de microfibra que tengas. Por motivos obvios, no uses el mismo que antes. Una vez más, limpia en la misma dirección y cuando pongas el líquido, échalo en el paño y nunca directamente en la televisión. Aunque tenemos instaurado el gesto de usar spray para hacer este tipo de limpiezas y de echarlo en la pantalla, no es algo que resulte recomendable. Por ello, usa siempre el líquido en el paño y luego pásalo por la televisión con suavidad.

Cuando ya hayas acabado ese paso, deja que la Smart TV se seque por sí sola. No tienes que hacer nada. Por lo general, se trata de un proceso bastante rápido debido al líquido que estás usando. Haz alguna otra cosa y luego vuelve a la tele para continuar, pero, sobre todo, no la toques, porque volverías a dejar marcas de dedos.

Después del secado, utiliza otro paño de microfibra y haz una pasada sensible y muy suave sobre la pantalla. Esto lo harás para eliminar cualquier rastro de polvo que se pueda haber pegado a la pantalla en el momento en el que se estaba secando el líquido de limpieza. Tiene que ser muy suavemente y tampoco te obsesiones mucho, porque seguramente esté tan limpia que no saques casi nada de polvo o suciedad. Con eso ya tendrás tu Smart TV QLED como nueva y podrás volver a concentrarte en ver series y películas. ¡Facilísimo!

 

Fuente: adslzone