Salvo las nuevas generaciones, estamos muy acostumbrados a tirar a la basura todo lo que no nos sirva. Si pensamos en todo lo que nuestras madres tiraron cuando éramos niños, seguramente nos llevaríamos las manos a la cabeza. ¿Dónde acabaron nuestros primeros videojuegos, ordenadores y consolas? ¡Mejor no lo pienses! La cuestión es que lo tiramos todo. Y eso también incluye los cargadores del móvil.
Tienes que reciclarlos
En serio, el cargador del móvil se recicla. Aunque te pueda parecer alucinante que una cosa tan insignificante tenga que ser reciclada de una manera adecuada, es la pura realidad. Y no tiene vuelta de hoja. Tal y como se puede ver en los términos de empresas de reciclaje o de centros especializados, los cargadores del móvil tienen que pasar por un proceso de reciclado siguiendo las normas. Esto no ocurre solo en España, sino que se trata de un estándar en la práctica mayoría del mundo.
Seguro que te ha sorprendido tanto como nosotros nos sorprendimos al descubrirlo en su momento. Y es que un cargador del móvil parece una de esas cosas que no tienen casi valor y que no deberíamos tener problemas en tirar. Pero no, no hay que hacerlo.
Materiales contaminantes y otros valiosos
Un cargador del móvil es mucho más de lo que puedas imaginar. Por una parte, dispone de materiales contaminantes que no pueden ir simplemente a la basura, porque estaremos haciendo otra de esas tropelías contra el medio ambiente que tan propias eran en el pasado. Los cables están formados por cobre, aluminio, plásticos como PVC o polietileno y otros muchos elementos.
Además de tener partes contaminantes, los cargadores y sus cables pasan a engrosar parte de esa basura electrónica que el mundo está generando cada vez más y que preocupa mucho a las autoridades. Recientemente se dijo que anualmente la sociedad genera más de 60 toneladas de basura electrónica que no se está reciclando de ninguna manera. Son dispositivos y productos que los ciudadanos tiramos al cubo de la basura sin preocuparnos de nada más cuando ya no funcionan y no pueden recuperar la capacidad de batería de nuestro móvil.
Si en lugar de tirar el cable lo reciclamos depositándolo en un punto limpio o en uno de los contenedores marcados para ello como los que hay en algunas ciudades españolas, estaremos ayudando a que muchos de sus componentes se puedan reutilizar. Cuando un cargador llega a un centro de reciclado, lo primero que hacen es desmontarlo y separar sus piezas. Se pone el plástico reutilizable por un lado, el aluminio por otro y, por supuesto, el cobre. Este último tiene mucho valor y será utilizado para la fabricación de nuevos cargadores en el futuro, por lo que el reciclado es fundamental. Los últimos elementos que no tienen ningún tipo de utilidad sí que terminarán como residuos, pero la diferencia después del proceso habrá sido enorme.
Así que no tires el cable Lightning
Apple se está preparando para el día en el que los cables Lightning comiencen a tirarse a la basura a un ritmo endiablado. Será con el lanzamiento del iPhone 15, el cual introduce el cable de carga USB-C genérico según lo establecido por la ley. A partir de ese momento, todos los usuarios que vengan de una generación previa del móvil de Apple y se pasen al siguiente, se encontrarán con que sus cargadores antiguos ya no sirven.
Por ello, recuerda lo que te hemos explicado y la importancia que tiene llevar el cargador en cuestión al punto limpio para que se puedan deshacer de él de una manera conveniente. Otra opción es lo que seguramente harán muchos de los usuarios, que no será otra cosa que dejar el cable antiguo dentro de una caja o en algún rincón del armario. Porque nunca se sabe si lo vas a llegar a necesitar en el futuro. No obstante, esto quizá acaba provocando que el cargador vaya a la basura antes o después, así que no estaría de más intentarlo reciclarlo cuanto antes.
Fuente: adslzone
