La UE pone fin al coche de gasolina, pero…

Ha sido un paso más, y todo parece que será el definitivo. Sí, porque la Unión Europea, con la aprobación del Consejo, UE ha dado la última aprobación con la intención de reducir el nivel de emisiones al completo en 2050.

Tanto el Parlamento Europeo, como el Consejo y la Comisión Europea, han llegado a un acuerdo para prohibir la venta de coches de combustión, es decir, aquellos coches de gasolina y diesel, en 2035. Haciendo, por tanto, que todos los vehículos nuevos sean completamente eléctricos, pues la venta de vehículos híbridos también se prohibirá en la mencionada fecha.

Esta futura prohibición forma parte del programa fit for 55 de la UE, un paquete medioambiental que consiste en una serie de medidas y normativas para minimizar el nivel de emisiones en hasta un 55 % en 2030, y en hasta un 100 % en 2050. La de prohibir los coches de gasolina y diesel, de hecho, es la primera medida que se pone en marcha. Pero, ¿qué es lo que ocurrirá y qué va a traer esta medida? ¿Cómo va a afectar?

Qué trae esta norma

Esto, como tal, no es otra cosa que la aprobación de la prohibición de la venta de coches nuevos que emitan gases contaminantes en los países miembros de la Unión Europea a partir de 2035, adelantando el plan establecido en 5 años, ya que en principio se iba a ejecutar en 2040.

¿Significa esto que en 2035 tendré que tirar mi coche gasolina y diésel a la basura? Nada de eso. Significa que, a partir de 2035 ya no se venderán coches nuevos con motores que emitan gases contaminantes, es decir, modelos con propulsores de combustión: gasolina, diésel, híbridos e incluso híbridos enchufables. Pero ojo con el matiz: ‘coches nuevos’; si es uno usado, del mercado de vehículos de segunda mano, tampoco te afectará.

La decisión de la Eurocámara se confronta con una realidad complicada en muchos mercados europeos, incluido el español. El 64% de turismos en circulación tienen más de una década, y la edad media del parque móvil supera ya los 13 años de antigüedad. Además, casi todos los coches son de combustión, por lo que la transición hacia un parque limpio parece complicada en poco más de una década.

Solo coches eléctricos, a batería e hidrógeno

En esa misma línea, y sobre el papel, a lo que ha llegado la Unión Europea sobre esta prohibición del coche de gasolina es que solo se podrán vender los coches 100% eléctricos, ya sean de batería o de pila de combustible de hidrógeno, también llamados fuel cell. Esto nos lleva también al punto de la eliminación por completo la posibilidad de vender coches híbridos, ya sean híbridos puros (HEV) o enchufables, (PHEV), pues estos siguen funcionando con motores térmicos.

El objetivo, no obstante, sigue siendo el coche de emisiones neutras, como es todo aquel carburante que no emita más CO₂ a la atmósfera cuando se quema que el que se ha captado para su fabricación. Esto es un punto importante, puesto que entre las medidas ratificadas se encuentra la de aquellos coches biocombustibles.

Esto arremete directamente contra las marcas de coches superdeportivos, puesto que habían dirigido sus desarrollos de motores de combustión hacia estos combustibles verdes sintéticos, que ahorran hasta un 85 % de emisiones de CO2 comparados con la gasolina tradicional.

Por último, y en dirección a este fin, se mantendrá el mecanismo de incentivos regulatorios para vehículos de cero y bajas emisiones hasta 2030. De manera que si un fabricante cumple con ciertos puntos de referencia para las ventas de vehículos de emisión cero y baja puede ser recompensado con objetivos de CO2 menos estrictos.

 

Fuente: adslzone