El coche híbrido sigue siendo favorable

Las actuales medidas restrictivas a nivel local, regional y europeo, así como las promesas de acabar con los vehículos de combustión interna de aquí a 2040 están haciendo que reine la confusión entre los consumidores. En muchos casos el desconcierto hace que no sepamos realmente si es mejor alquilar, si comprar, si esperarnos unos meses, si olvidarnos por completo del vehículo privado…

A día de hoy los vehículos eléctricos, los combustibles sintéticos, los Vehículos de Cero Emisiones Parciales (PZEV), los híbridos, los híbridos-enchufables, los coches de hidrógeno y los modelos movidos por autogas son los grandes protagonistas. En este sentido, todos comparten cartel con las limitaciones a la circulación de los vehículos más contaminantes en diversas ciudades.

Y ahí, con todo, en estos momentos hay vehículos que se postulan realmente bien para el día a día, aunque los hay más beneficiosos que otros. Es lo que puede ocurrir con el coche híbrido, un tipo de vehículo que se presenta favorable y que, en muchas situaciones, puede verse directamente mejor que el eléctrico 100%.

Qué es lo que tienen

Lo más fácil es, sin duda, tirar hacia los modelos, coches y marcas que conocemos y no complicarnos la vida. Aun así, si nos adentramos a ver qué características tienen esta nueva generación de vehículos, puede ser que veamos que son más adecuados para nosotros de lo que nos pensamos.

Como tal, y viéndose tan atractivos en el mercado, la característica principal de este tipo de coches es que combinan motores de combustión con baterías eléctricas, e incluso los hay que cuentan con un doble depósito de gasolina y gas natural. Sea como fuere, todos ellos gozan de la etiqueta ambiental ECO de la DGT. A excepción de algunos híbridos enchufables con más de 40 km de autonomía en modo eléctrico, que portan la etiqueta 0 Emisiones. De todos modos, por si tienes dudas, quizá estas razones para comprarte un coche híbrido te ayuden a tomar la decisión.

Sostenibles… y portan la etiqueta ECO

La etiqueta ECO de la Dirección General de Tráfico (DGT) fue diseñada con la finalidad de clasificar a los vehículos en función del impacto que produzcan en el medio ambiente. Muchas ciudades, sobre todo las más grandes, como Madrid, han implantado protocolos anticontaminación, de tal manera que limitan el acceso de vehículos a ciertas zonas.

Así, y como una de las grandes ventajas de los coches híbridos, en general, es que la DGT los clasifica con la etiqueta ECO, lo que les permite circular por la gran mayoría de lugares.

Su batería es autorrecargable

Las baterías de un coche híbrido son autorrecargables. Esto quiere decir, en el mejor sentido, que se alimentan en la conducción: al frenar, en las retenciones, al levantar el pie del acelerador… o lo que es lo mismo; a diferencia de los 100% eléctricos, con uno híbrido no tendrás que enchufarlas.

Mientras dispone de energía, la batería alimenta al motor eléctrico para que este mueva el vehículo. Así, en ocasiones la conducción será 100 % libre de emisiones y con consumo cero de combustible. Además, el eléctrico asiste al motor de combustión para disminuir la dependencia de este y minimizar el gasto de combustible.

Un mejor ahorro de combustible

Sin duda, este es el motivo principal y atractivo de los coches híbridos: ahorramos combustible. Esto ocurre, sobre todo, si vamos mucho por ciudad o hacemos trayectos cortos (si nos pasamos el día yendo por autovía, quizás el híbrido deja de ser tan buena idea).

El cierto es que, según Toyota, «el ahorro de combustible puede ser de hasta el 36% en comparación con un modelo de gasolina de características similares y de hasta el 12% respecto a un automóvil con una mecánica diésel». Aunque estos datos correspondan al ahorro de los coches de su gama, dan muchas pistas sobre el combustible que utilizaremos conduciendo cualquier coche híbrido.

Facilidad de conducción

Una razón más práctica por la que comprar un coche híbrido o eléctrico es que estos son mucho más fáciles de usar que los vehículos de combustión como los diésel o gasolina. Por norma general, los modelos híbridos y eléctricos no tienen caja de cambios, lo que le permite al conductor estar más relajado y centrado en la carretera, en vez de estar pendiente de cambiar de marchas.

Además, este tipo de vehículos disponen de cambio automático, es decir, el vehículo por si se gestiona por sí solo, cambiando las marchas en el momento que considere oportuno, lo que ofrece también una conducción mucho más suave.

Modelos hechos a tu medida

Además, la variedad de modelos híbridos en el mercado no deja de crecer. Quizás una de las marcas estrella es Toyota, que ha conseguido hibridizar su gama (es decir, ha convertido sus coches de toda la vida en híbridos). Esto significa que existen coches híbridos pequeños como el Yaris (aquí su ficha técnica), o grandes como el SUV C-HR. Por lo tanto, quieras un coche pequeño o un coche grande, muy probablemente existe un híbrido para ti.

Pero también hay otras marcas que se han animado con los híbridos como Lexus, Kia o Hyundai. Algunas marcas se animan también con lo que son los híbridos enchufables, coches que quieren alargar su autonomía eléctrica a partir de conectarlos a la red energética. Por su parte, hay otros fabricantes con sus modelos como los de Nissan, por ejemplo, que recargan solos sus baterías durante su uso.

 

Fuente: adslzone