Las plazas de eléctricos son reservas para recargas

La tecnología ha constituido un antes y un después en el sector de la automoción. ¿Quién hubiera imaginado hace unos años poder abrir el coche con el móvil, hablar con un dispositivo para que suba el volumen de la música o tener una aplicación que proteja a las mascotas cuando permanezcan solas en el vehículo?

Esto es lo que tenemos, en el mejor de los sentidos, con el coche eléctrico y del que se presenta en buena forma en estos momentos para todo lo que tiene que ver con el presente y futuro de la automoción. Con todo, y como uno de sus grandes favores, lo que tenemos con ellos también es que tienen un sistema de aparcamiento por plazas reservadas para los mismos, los conocidos como puntos de recarga.

De todos modos, como algo clave para los vehículos que no son electrificados, es que, aunque estas plazas concretas hayan ido creciendo, también es verdad que todavía no se ven tantas como se quisiera, y que incluso las cataloguemos de escasas, especialmente viendo los números mayoritarios de países como Francia, Holanda o Alemania. Esto las hace estar altamente solicitadas, de ahí que no sea de buen recibo que un usuario con coche de combustión decida aparcar en esas plazas que no son suyas… y que sí, acarrean multas.

No se puede aparcar en una plaza apta para eléctricos

Esta, como se puede ver en más casos de lo quisiéramos, es una queja generalizada y que crece a medida que aumenta la instalación de puntos de carga en zonas públicas (tales como centros comerciales y de ocio, hoteles y restaurantes).

Así que, e independientemente de si se trata de un coche enchufable o no, siempre y cuando no se esté utilizando el punto de recarga, estar estacionado en esa plaza conllevará multas, ya que se trata de una plaza reservada igual que las de minusválidos o motocicletas.

Tal y como se estipula, esta es una falta grave conforme lo impuesto por el Real Decreto Legislativo 6/2015, de 30 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial. Por tanto, ante esta situación, los conductores que no sean poseedores de un vehículo electrificado (híbrido o 100% eléctrico), deben tener claro que la utilización de estas plazas es exclusiva para la recarga del vehículo eléctrico

Podemos recibir multas de hasta 200 euros

En este sentido, estas plazas deberán estar señalizadas con la S17, la cual indica que ese aparcamiento está reservado para estacionamiento. Esta señal puede incluir una inscripción o un símbolo, que es la que representa ciertas clases de vehículos, indicando que el estacionamiento está reservado a esas clases. Una inscripción con indicaciones de tiempo limita la duración del estacionamiento señalado.

Por lo que, cualquier vehículo estacionado en una zona reservada para la recarga de coches eléctricos y no esté enchufado se enfrenta a una multa de 200 euros -reduciéndose a la mitad por pronto pago- al ser una falta grave, tal y como lo recoge el artículo 159 del Guía Codificada de Infracciones de la DGT.

Pero hay un matiz; y es que estas plazas tampoco son para todo el mundo que posea un coche eléctrico. O lo que es lo mismo; si el usuario de un electrificado no está recargando el vehículo y únicamente la está ocupando, también pueden ser sancionados. La razón es que estos aparcamientos son catalogados como puntos de carga que solo pueden ocuparse si se va a conectar el vehículo.

 

Fuente: adslzone