Durante el Black Friday, no importa si hacemos nuestras compras en un comercio físico, o si las hacemos en una tienda online. Sea donde sea que vayamos a gastarnos nuestro dinero, Internet es un aliado clave para combatir las estafas y timos de esta fecha. Sobre todo porque ahí, en Internet, es donde podemos comparar precios y revisar la evolución histórica de los precios de venta.

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Antes del Black Friday, lo mejor es estar preparado con una lista de precios y productos

Antes del Black Friday, y de cualquier fecha de ofertas y rebajas, lo mejor es prepararse. ¿Cómo? Con una libreta, o con una nota en el móvil, por ejemplo, en la que recojamos con anterioridad los productos en los que estamos interesados, y pongamos a su lado el precio al que lo hemos visto en diferentes comercios –para esto, Internet es muy útil-. Ahora bien, hay que tener cuidado y anticiparse lo suficienteincluso dos meses antes-, porque hay algunos comercios que en los días previos al Black Friday inflan los precios para después, el día del Black Friday, devolverlos a la normalidad y que parezca una oferta atractiva.

Con esta lista podremos hacer nuestras compras tanto en tiendas físicas como en comercios online, conociendo de antemano cuál es el precio anterior, y revisar el de la oferta, para saber si verdaderamente han hecho una rebaja o se trata de un caso como el que mencionábamos anteriormente. En el último punto de este artículo tienes algo más de información y ayuda sobre cómo llevar el seguimiento de precios sobre uno o varios productos, de la forma más sencilla posible.

Black Friday 2018: ofertas de fibra óptica y tarifas móviles

Enfréntate al Black Friday con las ideas claras: ¿qué quieres comprar, y qué no?

Ya sabemos que, tanto en el Black Friday como en otras fechas de ofertas, rebajas y descuentos, los comercios –y las marcas- tienen una serie de trucos para conseguir que acabemos gastando algo, aunque sea poco. Se ha podido comprobar que en algunas tiendas, durante los ‘Días sin IVA’ y Black Friday y similares se retira el stock de determinados productos de gran demanda y ‘se saca lo que no se vende’. Así, aunque no tengan lo que queremos, el impulso del momento nos lleva a revisar otras ofertas, y finalmente acabamos comprando algo que no teníamos previsto y que probablemente no necesitemos o queramos. Parece extraño, pero esto realmente ocurre.

Así que es una buena idea, antes de enfrentarnos al Black Friday, que tengamos apuntado o pensado qué queremos comprar, y qué no, y determinar un ‘precio objetivo’. Por ejemplo, puede que quieras comprarte una PlayStation 4, pero te gustaría hacerlo con 100 euros de descuento. Si es así, es recomendable que tengas apuntado el producto y precio objetivo de antemano, para no terminar comprando de forma impulsiva

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¿Sobre qué precio se aplica el descuento? A veces, no es tan grande como parece

Un descuento del 50% implica que vamos a pagar la mitad. Eso es fácil de comprender, evidentemente. Pero ¿la mitad de qué? Porque no es lo mismo un 50% sobre el PVPr, que un 50% sobre el precio propio del comercio; es decir, puede que Apple esté vendiendo un iPhone por 1.000 euros, y un 50% sería pagar 500 euros, pero que en Fulanito Móviles se venda por 1.100 euros, y entonces el precio a pagar sería de 550 euros. En ambos casos hablamos de un descuento del 50%, pero el precio original y el que vamos a pagar no es el mismo ¿verdad?

Esta es otra técnica que merece la pena repasar. Algunos comercios tienen precios ‘de origen’ más altos, y márgenes de beneficio más altos, y por tanto se permiten hacer descuentos relativos más grandes. Es decir, que pueden aplicar un descuento de un 75% del producto, de tal modo que sea una oferta más llamativa, pero con ello poner un precio de oferta idéntico a un comercio en el que han aplicado un 50% de descuento. Porque el precio original de este segundo comercio era más bajo. Y sin embargo, lo que pagamos en uno y otro sitio, con oferta, es exactamente lo mismo… o incluso algo más donde parece que el descuento es más agresivo.

Comprueba a quién y cómo le estás comprando un producto o servicio en el Black Friday

¿Es una tienda fiable? ¿Son quienes dicen ser?

Durante el Black Friday, especialmente en redes sociales se cuelan estafas y timos de todo tipo. Anuncios, por ejemplo, en los que nos invitan a comprar grandes ofertas. Por ejemplo, un iPhone 8 por apenas 49 euros –sí, es algo que personalmente ya he visto en Twitter-. Deberíamos desconfiar por defecto de comercios que no conozcamos con anterioridad. Y si los conocemos, y los descuentos son especialmente llamativos, quizá deberíamos comprobar que no se trate de phishing, es decir, un intento de suplantación de identidad, y que en realidad no sea un anuncio hecho por el comercio o la marca, sino por terceros.

Antes tiendas desconocidas, cuidado con los datos bancarios y con introducir nuestra tarjeta de débito o crédito en cualquier parte. Porque efectivamente podría tratarse de una estafa, y que nuestro dinero acabe quién sabe dónde. Ante comercios conocidos, si se trata de una compra online, revisa que se trate de la fuente oficial y no, como decíamos anteriormente, de un intento de suplantación de identidad en el que pueden robarte tus datos bancarios.

Origen, garantía, fecha y gastos de envío…

De nuevo, si vas a comprar durante el Black Friday en una tienda en la que no lo has hecho anteriormente, y es por Internet, revisa los datos clave. Quiénes son y cómo venden, básicamente. Es decir, desde dónde envían, qué garantías ofrecen sobre sus productos o servicios, condiciones de devolución, plazos de entrega o envío, y por supuesto los gastos de envío. Si te lo venden desde fuera de España –pongamos China, por ejemplo-, recuerda que la garantía no es la misma. Los productos comprados aquí –o más bien, vendidos por comercios en España- tienen una garantía de dos años por obligación.

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En tiendas como eBay, o incluso en Amazon si se trata de vendedores terceros, podemos encontrarnos con un precio reducido que se ‘infla’ con los gastos de envío. Y también en otras tiendas, claro. Así que conviene revisar los gastos de envío antes de llevar a cabo nuestra compra. Y volviendo al ‘origen’ del envío, es algo importante también porque según qué productos, podemos encontrarnos con que pasen por aduanas y nos acaben costando más de lo que esperábamos, o que se retrasen de forma destacable.

Relativo a todo esto, otro paso recomendable es revisar foros y redes sociales. Allí podemos encontrar opiniones y experiencias de otras personas que ya hayan comprado allí. Y lo más recomendable es, si vamos a revisar opiniones, tratar de ver el máximo posible. Porque incluso en esto, en ciertas ocasiones, hay opiniones falsas en determinados foros que se han publicado por parte del propio comercio con la intención de dar confianza a potenciales clientes. Cuantas más referencias positivas tengamos, como es evidente, más fiable será esa opinión general respecto a una tienda online.

El clásico: compara precios y revisa la evolución histórica de precios para evitar timos y estafas

Habíamos mencionado el tema por encima, pero hay que incidir en ello: compara precios. No todos los descuentos que nos dicen lo son realmente, ni las ofertas, ni las rebajas. Así que lo más conveniente es tener instalada una extensión en el navegador web que nos permite comprobar la evolución histórica de precios para un determinado producto en un determinado comercio. Para Amazon, por ejemplo, son muchas las opciones disponibles.

Si necesitas ayuda en este tema, justo a continuación tienes un artículo en el que, con todo lujo de detalles, te explicamos cómo encontrar ofertas en Amazon. Y evidentemente, también te contamos cómo tienes que hacer para llevar un seguimiento de precios y evitar que te puedan colar por oferta algo que no lo es. No solo dentro de Amazon, porque podemos usar estos mismos datos para tener una referencia en cualquier comercio; y esta opción nos ayudará a completar justo lo que explicábamos en el primer punto de este artículo.

Cómo encontrar (y comprobar) ofertas en Amazon

 

Fuente: adslzone