Navegar por Internet usando el móvil en lugar del PC es un hábito cada vez más extendido entre la población. La facilidad con la que podemos conectarnos a la red de redes sin tener que encender el ordenador es una gran ventaja y de cara a ahorrar en el consumo de datos móviles, muchas páginas webs llevan ya un tiempo ofrecen una versión adaptativa más ligera. No ocurre en todos los casos, pero las principales páginas webs están cubriendo esta vía con sus versiones responsive, aunque el peso medio de todos los sitios del ciberespacio sigue creciendo casi al mismo ritmo según datos de Alexa.
El último registro ha cifrado en 2.301 KB el peso de las webs, algo que sin ir más lejos, ya supera el tamaño de videojuegos míticos de ordenador de hace décadas como el Doom (que tiene un peso de 2.250 KB) o el Sim City 2000. La culpa de este avance imparable la tienen la cantidad de imágenes, nuevas fuentes y colores, contenido multimedia, anuncios y otros elementos visuales que se implementan en las páginas webs para dotarlas de más vistosidad y ofrecer un mayor número de información y posibilidades al visitante.
Las grandes empresas promueven la navegación “ligera”
Aunque sitios como Google (en el top de los más visitados) no tienen tantos problemas al respecto debido a la simplicidad, la tarea de reducir su tamaño se vuelve titánica para muchas otras webs que no quieren perder su esencia a la hora de prescindir de elementos en el sitio para ofrecer una navegación más fluida y ligera sobre todo pensando en los usuarios que acceden desde un smartphone. En enero de 2011, el peso medio de las páginas era de apenas 750 KB.
La industria ha tomado cartas en el asunto y algunas plataformas como Facebook quieren acelerar la navegación web gracias por ejemplo a soluciones como los artículos instantáneos y con la tecnología AMP del gigante tecnológico Google para acelerar la carga de páginas webs en dispositivos móviles se espera frenar el aumento del peso medio de la Web durante este 2016.
