Los taxistas de Madrid pueden celebrar una pequeña victoria en la guerra abierta que mantienen contra aplicaciones y servicios de transporte colaborativo o alquiler de chofer, que plataformas como Uber o BlaBlaCar llevan a cabo en nuestro país. En esta ocasión, la noticia se centra en la capital de España porque es allí donde el gremio de profesionales del sector de transporte de viajeros ha obtenido de la Comunidad de Madrid el compromiso de sancionar cualquier práctica irregular que lleve a cabo en el servicio la compañía Uber.

Borja Carabante, el viceconsejero de Transportes, Infraestructuras y Vivienda de la Comunidad de Madrid ha anunciado la nueva medida con la que las fuerzas del orden podrán inspeccionar y multar a los conductores de Uber siempre que no aporten la documentación necesaria para ejercer la actividad. Según ha declarado Carabante, se va a “garantizar la seguridad de los usuarios y evitar la competencia desleal y vamos a trabajar conjuntamente con el taxi para tratar la problemática de Uber”.

De momento, Uber  deberá remitir la documentación requerida, para lo cual dispone de diez días de plazo. Con ello tendrá que demostrar que cumple con la legislación vigente en materia de transporte de viajeros. En el caso de que partir del próximo lunes Uber no tenga sus papeles en regla, las sanciones por cada servicio prestado alcanzarían los 18.000 euros.

Multas de hasta 18.000 a conductores que no cumplan la Ley

Los conductores que colaboran con esta empresa no saldrán indemnes de estas hipotéticas multas, ya que en el caso de ser “cazados” incumpliendo los requisitos que marca la ley, las sanciones irían desde 4.000 a 6.000 euros, llegando a 18.000 euros en caso de conductores reincidentes. Los taxistas madrileños han demandado la colaboración tanto de la Guardia Civil como de la Policía Local para llevar a cabo inspecciones de los vehículos que prestan servicio con Uber. Este servicio de transporte opera en Madrid desde el pasado 22 de septiembre y los usuarios que se encuentren en esta ciudad ya pueden acceder a desplazamientos mediante esta plataforma, a precios muy inferiores a los pagados a través de un taxi convencional.

No parece que vaya a ser el último capítulo en esta historia. Uber se ha mostrado decidida a seguir ofreciendo este servicio ya que consideran que no están incumpliendo la legislación, y los taxistas han anunciado que mantendrán las protestas para proteger su actividad de la competencia desleal. Si ninguno de los dos da su brazo a torcer, se avecinan nuevos enfrentamientos entre ambos lados del conflicto.

 

Fuente: Europa Press | adslzone