En la pasada WWDC 2014, Apple anunció a bombo y platillo el lanzamiento de su nuevo sistema de monitorización de la salud y actividades físicas. Lo bautizó como Health Kit, y es la gran apuesta para liderar las aplicaciones de fitness y salud en las generaciones venideras de dispositivos móviles y weareable, principalmente. La fiebre que se espera que se desate en los próximos tiempos, por productos como relojes o pulseras inteligentes, va a potenciar el uso de multitud de aplicaciones desarrolladas específicamente para ser adaptadas a las peculiares características de estos gadgets. Y sin duda, el cuidado de la salud y la práctica de actividades físicas y deportivas van a estar a la cabeza de ello.

Apple quiere volver a ser una referencia, esta vez en el sector de las aplicaciones que controlan el estado físico y la salud, y para tratar de lograrlo presentó en sociedad Health Kit, su aplicación dedicada a la monitorización de distintos parámetros y constantes vitales de nuestro cuerpo. Pero tal vez con lo que no contaban los de Cupertino era con los obstáculos legales y burocráticos que iban a tener que sortear para llevar a cabo su desarrollo. Se espera que la aplicación venga integrada en el nuevo iPhone 6 del que se rumorea que podría ser presentado el próximo mes de septiembre.

Y es que una de las principales ambiciones de Apple es no limitar esta aplicación al uso de personas que practiquen actividades deportivas. Por ello, está negociando con diversas compañías tecnológicas proveedoras de servicios médicos, para que Health Kit se pueda usar en los servicio de los hospitales y centros de salud de todo el mundo.  Se crearía de este modo, una herramienta más para proporcionar a los médicos un mejor seguimiento de la evolución y los síntomas de los pacientes. De esta forma, parámetros como la presión sanguínea, el ritmo cardíaco o el peso, serán factores fácilmente identificables y no habrá que recurrir a distintos medidores al estar toda la información centralizada.

La gestión de la información privada de Health Kit

Pero Apple deberá además decidir de qué forma van a poder los usuarios autorizar la recogida de datos privados relativos a su salud, para poder ser enviados o consultados por los servicios de salud. Para ello, permitirá otorgar o no autorizaciones de forma manual a terceras empresas para poder acceder a dichos datos, a la vez que aquella información relativa a la salud que sea almacenada en iCloud, podría disponer de un cifrado para evitar que pueda ser accesible por otras personas. La publicación o suministro de información relativa a la salud se suele regir por normativas más estrictas y restrictivas que otro tipo de datos y Apple tendrá que adecuar las características de estas funcionalidades a la legislación vigente en cada territorio. La privacidad y la protección de información sensible de los usuarios es una de las piedras que Health Kit se va a encontrar en el camino, veremos si en un futuro logra consolidarse como un importante avance en el campo de la medicina.

 

Fuente: Reuters | adslzone