Alrededor de 950 salas pertenecientes a estas dos compañías están vendiendo durante estos días las entradas a 3,50 euros (lunes, martes y miércoles). A pesar de que tras el éxito de la Fiesta del Cine el sector avisó de que esta política no podría tener continuidad, las empresas que acaparan el 35% de las pantallas de cine de nuestro país han querido volver a apostar por esta política de cara a revertir el escaso flujo de espectadores.
No obstante, no es oro todo lo que reluce en esta nueva promoción puesto que por un lado apuestan por la descarga del cupón y por otro optan por lanzar un número limitado de 100.000 entradas a este precio al margen de obligar a los usuarios a hacerse fan de su página en Facebook. En definitiva, ligeras trabas para acceder a una oferta que no deja de ser atractiva pero que adolece de la continuidad necesaria para que volver a atraer al público a las salas.
El discurso de la supuesta insostenibilidad del cine a precios accesibles sigue legitimándose con este tipo de ofertas puntuales. Mientras las compañías quieren hacer ver que han entrado en una supuesta guerra de precios, la realidad dista mucho de su pretensión y la de los espectadores, que no es otra que llenar las salas con frecuencia.
Acudir al cine en algunas ciudades sigue teniendo un precio muy elevado durante el fin de semana. Si la película es en 3D el precio puede llegar a superar los 10 euros en algunas sesiones, y este precio resulta inasumible, por ejemplo, para muchas familias con varios miembros. Además, el hecho de limitar las promociones a los días con menor afluencia no soluciona el problema de las salas semivacías en sesiones supuestamente más reclamadas como los fines de semana, que es cuando el grueso de la población dispone de tiempo para acudir a estos eventos de ocio.
Así pues, nos volvemos a encontrar con meros parches que, si bien son de agradecer en los tiempos que corren, no solucionan el problema real del cine, que es su elevado precio general. Hasta que la industria no se atreva a dar el paso continuarán estos éxitos puntuales (apabullantes en el caso de la Fiesta del Cine de octubre con 1,5 millones de entradas vendidas en solo tres días), pero seguirá sin cambiarse la tendencia negativa en la que se ha entrado en los últimos años. Ante problemas graves, soluciones drásticas, pero estas no están llegando más que con cuentagotas.
Fuente: adslzone
