Es probable que muchos de nosotros no solamos hacer copias de seguridad, aunque sepamos que son importantes. Si por cualquier cosa nuestro ordenador falla, es bastante recomendable que tengamos todos los archivos, o al menos los importantes, guardados en otro sitio. Siempre viene bien y además en Windows 10 es bastante sencillo.
Lo primero que necesitamos es un disco duro de repuesto, ya sea interno o externo donde meter todos los archivos que queramos. Una vez que lo tengamos ya no gastaremos más dinero en todo el proceso.
Lo primero es ir a ‘Configuración’ pinchando en el botón de Inicio del escritorio. Una vez allí vamos al apartado de ‘Actualización y seguridad’.
Dentro de este apartado, en la parte izquierda, podemos observar un menú en donde buscaremos ‘Copia de seguridad’.
Si pinchamos ahí veremos un apartado que pone ‘Copia de seguridad con Historial de archivos’. Ahí observamos que pone ‘Agregar una unidad’. >Pues bien, desde ese botón se puede elegir el sitio dónde queremos guardar la copia de seguridad.
Más opciones
¿Pero qué pasa si no queremos guardar todos los archivos sino algunas carpetas en concreto? Pues se puede hacer. Simplemente hay que dar en ‘Más opciones’ y desde ese apartado podemos prácticamente personalizar la copia de seguridad. Pero no solo podemos elegir otras carpetas para incluirlas en la copia sino que también podremos cambiar los tiempos y la frecuencia en la que Windows realice esta copia de seguridad.
Obviamente desde esta pestaña de ‘Configuración’ también podremos cambiar en todo momento la unidad en la que guardamos la copia de seguridad y además restaurar archivos desde una copia de seguridad actual.
Pues bien, así de fácil es realizar una copia de seguridad en Windows 10. Solamente hace falta un disco duro de repuesto, ya sea interno o externo y realizar unos pocos pasos. De esta manera tendremos todos nuestros archivos a buen recaudo por si tenemos algún problema con nuestro ordenador.
Fuente: softzone
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