Hay bastantes usuarios a los que les gusta Windows pero que prefieren tener un ordenador Mac, por su diseño, o simplemente por sus gustos personales. Pues bien, antes era más complicado poner a rodar un sistema operativo ajeno a Apple en sus ordenadores, pero vieron que era imposible poner puertas al campo y empezaron a apoyarlo para que la experiencia de los usuarios, que al fin y al cabo son suyos ya que han comprado un producto de Apple, fuera más satisfactoria usaran el sistema operativo que usaran.
Eso sí, lo primero que hay que hacer es, obviamente tener una licencia Windows 10 e, imprescindible, un archivo ISO de la versión de 64 bits para instalar el sistema operativo en el Mac. Después hay que comprobar si hay actualizaciones disponibles para asegurarse de que OS X, el firmware del Mac, y el Asistente Boot Camp están al día.
No todos los Mac puede actualizar a Windows 10
Después simplemente hay que buscar el Asistente Boot Camp, que se puede encontrar fácilmente desde Spotligth, y seguir los pasos que nos vayan indicando. De esta manera tan fácil podremos tener un arranque dual de Windows 10 y de OS X. Además, el nuevo Boot Camp 6 tendrá soporte para USB 3, C-USB, Thunderbolt, SD / SDXC y Superdrive en Windows 10.
Hay que decir que la instalación de Windows 10 en el Mac es recomendable si tenemos una aplicación o un juego bastante pesado que necesite ejecutarse de forma nativa en el hardware. Si solo lo queremos para apps ligeras lo mejor es utilizar un software de virtualización como Parallels o VMware.
Eso sí, no todos los Mac son compatibles con Windows 10. En la foto que os hemos puesto más arriba tenéis todos los que permiten la instalación del nuevo sistema operativo de Microsoft.
¿Habéis utilizado alguna vez alguna versión de Windows en vuestro ordenador Mac? ¿Qué tal la experiencia? ¿Lo recomendáis para el resto de usuarios de Mac?
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