Elon Musk se comprometió a brindar sus servicios de Starlink al principio de la guerra entre Ucrania y Rusia. Pasados los meses, el empresario anunció que no podía seguir pagando de su bolsillo el coste del despliegue y mantenimiento de los satélites. En suma, pidió al Gobierno de Estados Unidos que se encargase de ello si querían que su Internet siguiese activo en la zona.
Tras la polémica de las palabras de Musk, el año pasado Bloomberg News reveló que el Ejército estadounidense había aceptado las condiciones del magnate y había firmado un contrato. El Pentágono no aclaró cuánto dinero se habían comprometido a pagar para que Starlink continuase en Ucrania, pero un funcionario anónimo ha revelado la cifra al medio un año más tarde.
Según afirma la fuente de información, el acuerdo entre el Gobierno de EEUU y SpaceX para el despliegue de terminales Starlink está valorado en 23 millones de dólares. Este contrato comenzó el pasado junio de 2023 y terminará en mayo de 2024, pero el funcionario no ha revelado si se renovará.
El Internet de Starlink en Ucrania
La comunicación es un elemento fundamental durante las guerras y suele estar muy limitado. Por ese motivo, el servicio de Internet satelital de Musk es una pieza clave para las tropas ucranianas desde el inicio de la guerra con Rusia. Gracias a él, pueden comunicarse entre sí en el frente sin sufrir tantos cortes de conexión e informar de lo que ocurre al resto del mundo.
Mykhailo Fedorov, ministro de Transformación Digital, notificó en mayo de 2022, cuando la guerra llevaba pocos meses activa, que las terminales de Starlink estaban siendo esenciales. En esos momentos, SpaceX había desplegado 10.000 satélites que proporcionaban una infraestructura de comunicaciones crítica, según el político.
Por lo tanto, el apoyo de Estados Unidos a Ucrania en su conflicto bélico requería mantener el Internet brindado por Starlink, algo que hicieron a través del contrato millonario. Según han confirmado algunos funcionarios militares estadounidenses, las terminales portátiles Starlink en el país de Europa del Este ha sido clave para mantener conectada tanto a la población civil como al Ejército ucraniano.
«Continuamos trabajando con una serie de socios globales para asegurar que Ucrania tiene las capacidades satelitales y de comunicación que necesitan -señaló el Pentágono tras dar a conocer su contrato con SpaceX el año pasado-. Las comunicaciones por satélite suponen una capa vital en la red de comunicaciones de Ucrania, y hemos cerrado con Starlink un contrato para servicios de este tipo».
Aunque 23 millones de dólares pueda parecer mucho, no lo es tanto si tenemos en cuenta lo que cuesta el servicio Starlink. De hecho, la empresa ha firmado otro acuerdo con el Gobierno estadounidense de cientos de millones de dólares para convertirse en un socio clave para el lanzamiento de unos satélites de seguridad nacional muy sensibles del país.
