Así lo ha anunciado hoy la Comisión Europea, que quiere que todos los portales y empresas que permitan transferir bitcoin y cualquier criptomoneda recopilen datos del emisor y el receptor. Con ello quieren ponérselo fácil a las autoridades para intentar identificar con mayor facilidad los intercambios de dinero negro, ya sea para blanqueo de capitales, para financiar a bandas criminales, o incluso para el terrorismo.
Nombre del emisor y el receptor
Esta normativa aplicaría la llamada «regla de viaje» a las criptomonedas, que obliga a seguirle el rastro a todas las transacciones, y que ya se aplica por ejemplo en las transferencias bancarias.
Los portales de intercambio tendrán que recopilar el nombre del cliente, dirección, fecha de nacimiento, número de cuenta, y el nombre de la persona que va a recibir los activos en la transacción. En el caso de que en la transacción falte algo de información del destinatario, el portal que reciba los activos tendrá que completar la información.
A la hora de abrir cuentas relacionadas con criptomonedas, estará prohibido hacerlo de manera anónima. La ley europea actual impide abrir cuentas bancarias anónimas, y esto ahora se aplicará también a las cuentas relacionadas con las criptodivisas para facilitar la declaración de las criptomonedas.
La Unión Europea lleva meses trabajando en esta solución, con el objetivo de ofrecer un marco legal que cumpla con los estándares internacionales, pero que no introduzca una carga regulatoria adicional en la industria.
Tendrá que aprobarlo el Parlamento Europeo
Tras la propuesta de la Comisión Europea, tendrá que ser el Parlamento Europeo el que la someta a votación. Si finalmente se aprueba, los Estados Miembros tendrán que introducirla en su legislación nacional, para lo cual tendrán hasta un máximo de dos años. Por ello, todavía queda bastante para que esta normativa se empiece a aplicar.
Mientras tanto, las criptomonedas siguen cayendo lentamente con respecto a los máximos alcanzados esta primavera. El bitcoin por ejemplo ha perdido la mitad de su valor con respecto al máximo alcanzado en abril, y el Ethereum ha perdido incluso más de la mitad de su valor con respecto a las espectaculares cifras alcanzadas en el mes de mayo de más de 4.300 dólares, por los 1.800 en los que cotiza actualmente. A las criptomonedas no les ha sentado nada bien tampoco noticias como que China quiere acabar con las granjas de minado y su excesivo consumo energético.
