Mientras que Windows siempre a sido un producto que se vendía a los usuarios y a las empresas tal cual, con su correspondiente soporte, los modelos de negocio as-a-service han ganado en los últimos años una gran popularidad ya que suponen una gran cantidad de ventajas tanto para los usuarios como para las empresas que desarrollan el servicio.

Normalmente Microsoft lanzaba nuevas versiones del sistema operativo cada 3 años. Por ejemplo, Windows 7 se lanzó en 2009 y Windows 8.1 en 2012. Sin embargo, desde la llegada de Windows 10 (en 2015, otros 3 años de diferencia) la cosa ha cambiado, y es que ahora mismo es la última versión del sistema operativo, y además seguirá siéndolo durante bastante tiempo más.

Windows 10 seguirá evolucionando, no hay pensado lanzar Windows 11

La versión que tenemos ahora mismo de Windows 10 (May 2019 Update) no es ni parecida a la que vimos en 2015, ni siquiera a la versión 1709 que ya empezaba a dar forma al sistema operativo. Todos los años Microsoft lanza dos grandes actualizaciones de su sistema operativo, una en primavera y otra en otoño, actualizaciones que llegan con una gran cantidad de cambios, mejoras, novedades y correcciones para evolucionar activamente al sistema operativo.

Hace un par de meses llegó a nosotros Windows 10 May 2019 Update, la que hasta ahora es la última actualización del sistema operativo, y además la compañía ya está trabajando en Windows 10 19H2, la actualización que llegará después de este verano, y en Windows 10 20H1, la primera actualización de primavera del año que viene.

Todas estas actualizaciones siguen cambiando al sistema operativo, incluyendo nuevas mejoras y características, así como brindando a los usuarios una mayor seguridad. Y todo gracias al modelo Windows as a Service.

Por ello, aunque cabría esperar ver pronto Windows 11, esto aún no está ni en los planes de Microsoft. Incluso podría ser que nunca lleguemos a verlo.

Las ventajas del modelo Windows as a Service para los usuarios y para Microsoft

En el propio blog de Microsoft podemos ver un artículo donde uno de los desarrolladores del sistema operativo demuestra cómo ha evolucionado el sistema operativo, cómo con cada actualización ha ido recibiendo nuevas mejoras y características y cómo es posible que no veamos un Windows 11 a corto plazo según los planes de la compañía.

Ventajas-Windows-10-as-a-Service

Con el final de soporte para Windows 7 a la vuelta de la esquina, en menos de 6 meses, la compañía está centrando sus esfuerzos por atraer al mayor número de usuarios posible a Windows 10. Y esto solo es posible gracias al modelo de desarrollo que está siguiendo ahora, llamado Windows as a Service y que, en cierto modo, es similar al modelo Rolling Release visto en algunas distros Linux.

Este modelo de actualizaciones permite a Microsoft mejorar la estabilidad del sistema operativo con actualizaciones de calidad y más de 16 millones de drivers, ser un sistema operativo seguro y proteger a los usuarios frente a las constantes amenazas, mejorar la productividad de los usuarios con nuevas funciones y herramientas diseñadas para este fin y, además, reducir los costes de desarrollo. Así es como Microsoft puede ofrecer todas las actualizaciones de forma totalmente gratuita.

Por estos motivos, Microsoft no tiene en mente aún trabajar en Windows 11. El modelo de desarrollo de Windows 10 va por buen camino, y así va a seguir por ahora. Así seguiremos recibiendo parches de seguridad todos los meses, igual que actualizaciones acumulativas, y cada 6 meses veremos grandes actualizaciones, como 19H2 o la esperada 20H1.

Windows 11 podría ser una realidad en el futuro, aunque aún tendrán que pasar bastantes más años.

 

Fuente: Microsoft | softzone