Con este nuevo lanzamiento, Apple se ha centrado especialmente en las prestaciones nativas, así como para ofrecer más posibilidades a los desarrolladores para ofrecer información en el “watchface”, es decir, en la pantalla sin haber desbloqueado el reloj inteligente.
El Apple Watch se vuelve más independiente
Una de las diferencias principales está en el soporte de aplicaciones nativas. Como ocurría anteriormente, la interfaz de las aplicaciones se traslada al Apple Watch desde el teléfono inteligente. Sin embargo, la diferencia principal está en que la aplicación corre de forma autónoma en el reloj inteligente, sin necesidad de que haya acceso directo al dispositivo iOS que tenemos sincronizado.
Por otra parte, Apple ha dado mayor “independencia” también al acelerómetro de su reloj inteligente, que se puede ahora utilizar de forma autónoma para el registro de variaciones en la monitorización de actividades deportivas. De esta forma, el motor táptico también ha tomado protagonismo con funciones que se podrán añadir a la corona digital.
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Fuente: adslzone
