Estos términos anteriormente comentados nos ayudarán, por ejemplo, a tener una completa disposición de todos nuestros datos, ficheros y carpetas desde cualquier ubicación del mundo gracias a servicios en la Nube como Dropbox, Box o Google Drive. Por otro lado el control remoto por medio de aplicaciones como TeamViewer nos permite tener el manejo total de un PC desde cualquier otro a la hora de configurarlo, solucionar problemas o incluso ejecutar aplicaciones.
Otra de las soluciones de las que disponemos a la hora de trabajar con diferentes PCs de manera rápida y cómoda, es el uso de las aplicaciones portables, es decir, utilizando las herramientas de Windows a las que estamos habituados o similares en el ordenador de casa sin necesidad de tener que instalarlas. Existe una enorme cantidad de ellas, aunque en estas líneas os vamos dar algunos ejemplos de las que consideramos más importantes y cuyo correcto funcionamiento está más que contrastado.
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En primer lugar probablemente necesitemos una suite ofimática comparable y compatible con el habitual Office de Microsoft, para lo que disponemos de LibreOffice, una herramienta portable que abre y guarda todo tipo de documentos ofimáticos en los formatos más usados. En lo que se refiere al tratamiento fotográfico, una de las aplicaciones portables y gratuitas más destacadas es Gimp, un editor de imágenes que para usuarios no profesionales podría ser equiparable al famoso Adobe Photoshop.
Imprescindible también es llevar en el bolsillo el navegador de Internet al que estemos acostumbrados a utilizar en casa, como ocurre con Firefox, que en su versión portable también permite almacenar datos personales como contraseñas o configuraciones ya definidas. A la hora de trabajar de manera eficiente con una gran cantidad de información, siempre es recomendable utilizar un compresor de ficheros y carpetas, y en su versión portable encontramos la herramienta gratuita 7-zip que es compatible con la mayoría de los formatos de compresión conocidos.
Por último no podíamos olvidarnos de llevar en nuestro USB un reproductor de vídeo para poder disfrutar de nuestra película o serie favorita en los momentos de ocio cuando salimos de viaje, por ejemplo. Para ello os recomendamos VLC, un reproductor con soporte para casi todos los códecs y formatos de audio y vídeo actuales.
Fuente: adslzone
