Cuando el pasado mes de septiembre, Apple anunció el sistema Apple Pay para poder pagar en comercios usando el iPhone 6 o el iPhone 6 Plus, daba la sensación de qué la jugada podía llegar algo tarde. No en vano, la tecnología NFC ya lleva tiempo presente en muchos dispositivos móviles del mercado, pero en la mayoría de países (España inclusive), esta tecnología está todavía en pañales. La llegada de pesos pesados como Samsung Pay o la tecnología de Cupertino, van a suponer sin duda un fuerte empujón para el pago mediante teléfono móvil, aunque falta por ver si será suficiente. La tecnología de Apple Pay es compatible con VISA, MasterCard y American Express, tres de los grandes dentro de pagos bancarios.
¿Qué aporta Samsung Pay?
La opción de Samsung viene de la mano con MasterCard, una de las principales compañías de tarjetas bancarias a nivel mundial que lleva tiempo desarrollando tecnologías para reforzar la seguridad del usuario en los pagos. Gracias a la unión de ambas empresas, Samsung Pay permitirá pagar tanto en terminales de venta adaptados a la tecnología contactless, como en los tradicionales. Las propias tarjetas MasterCard de débito y crédito se podrán utilizar con Samsung Pay, de forma más segura.
El uso de la plataforma KNOX de Samsung ayuda a reforzar esa seguridad de la que hablábamos, un punto diferencial sin duda debido al software creado por la empresa surcoreana y que ya aplica en sus principales dispositivos. Uno de los puntos llamativos de Samsung Pay será la autenticación mediante la huella dactilar del usuario, que se beneficiará del nuevo sensor introducido en los nuevos Galaxy S6 y Galaxy S6 Edge.
Esta tecnología estará disponible a partir de este verano en Estados Unidos y próximamente se espera su lanzamiento en otros mercados. España por tanto podría tardar aún un tiempo en recibir esta tecnología. Apple Pay por su parte, tampoco está todavía disponible en nuestro país, aunque si lo está en Estados Unidos, de nuevo será una carrera entre estos dos sistemas que tendrán por delante el reto de conquistar un mercado que todavía está en pleno desarrollo, pero que tiene un potencial enorme.
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