La compañía canadiense ha vivido en 2013 el peor año de su historia. Enormes pérdidas y productos que no han tenido el impacto que deseaban han sido la tónica dominante durante estos 12 meses. Un tremendo ajuste se cobraba el despido de 4.500 empleados, un 40% de la empresa y el balance negativo alcanzaba los 4.400 millones de dólares. Además el fiasco de BlackBerry 10 ha hundido la cuota de mercado hasta valores mínimos.

Por si fuera poco, la cosa lejos de mejorar ahora que el año está a punto de acabar, empeora más aún si cabe. Desde Waterloo anunciaban la reciente cancelación de dos terminales de bajo costo, orientados a mercados emergentes, que pretendían poner en el mercado. La causa: Las previsiones auguraban nuevas pérdidas.

El BlackBerry Live 14 ni siquiera va a tener lugar como otros años. No hay nada que presentar, ya que los dos dispositivos cancelados eran las principales novedades que tenían preparadas. Y mucho menos, nada que celebrar.

No bajan los brazos. La compañía no se da por vencida y hace unos días os hablábamos sobre los motivos para la esperanza de BlackBerry. Y es que Jonh Chen, presidente ejecutivo y conocido por reflotar otras empresas anteriormente, afirmaba que la compañía tiene recursos suficientes y un plan de salvación para revertir la situación actual basándose en el sector empresarial con BlackBerry Enterprise Service.

Además, entre los planes de los canadienses no está la idea de abandonar la fabricación de terminales móviles, y para ello ha alcanzado un acuerdo multianual con Foxconn. La multinacional con sede en Taiwán, es uno de los mayores fabricantes de componentes electrónicos en todo el mundo, y se encargarán, en principio, de la fabricación de 4 nuevos dispositivos BlackBerry para 2014, dos de gama baja y dos más de gama alta.

Desde BlackBerry parecen tener esperanza en levantar de nuevo el vuelo sin la necesidad de vender. Pero necesitan un milagro, ya que todo lo que han intentado este 2013 ha acabado abocado al fracaso, y cambiar la tendencia el próximo año no va a ser nada fácil, ya sabemos cómo suele funcionar este mercado.

 

Fuente: The Wall Street Journal | adslzone