Uno de los próximos proyectos de la agencia espacial norteamericana será mejorar las comunicaciones con los vehículos que envía a otros planetas y satélites, que actualmente alcanzan velocidades de unos 6 Mbps, teniendo que esperar 90 minutos en recibir una imagen de alta resolución desde Marte vía ondas de radio.

El objetivo es reducir este tiempo a aproximadamente cinco minutos utilizando para ello un enlace láser de 100 Mbps, aunque tendrán que esperar hasta el año 2016. Con esta tasa de envío de datos, se espera poder hacer streaming de vídeo en alta definición a través del espacio.

Conceptualmente, se trata de un sistema de fibra óptica al que se le elimina precisamente la fibra, para emitir pulsos de luz a través del aire. Esto es algo relativamente habitual en enlaces inalámbricos de alta capacidad (por ejemplo, entre estaciones base de móvil), e incluso hay algún operador dedicado a ello.

Aunque la velocidad máxima teórica de esta tecnología se encuentra en las decenas de Gigabits por segundo, es comprensible que de momento las velocidades se mantengan bastante más limitadas, pensando sobre todo en dispositivos que estén en lugares tan lejanos como Marte donde el consumo energético es clave. Otra cosa serán los satélites que orbitan La Tierra, que sí podrán disfrutar de conexiones más rápidas.

Además, en la NASA ya tienen planteada la situación en la que, debido a las nubes u otros fenómenos, la visión con las estaciones terrestres no sea directa, con lo que el enlace se cae. Para solventarlo, la red de satélites en órbita y las propias estaciones base tendrán la responsabilidad de encontrar una vía para enviar los datos o, si es imposible, mantenerlos a la espera hasta que se pueda.

La primera demostración con una comunicación entre dos bases y un satélite se espera para dentro de dos o tres años.

 

Imagen: NASA

Fuente: bandaancha