Lo mismo opinan en la Asociación de Internautas, donde ya hablan del fin del ADSL, que quedará sustituido por el FTTH, una tecnología con mayor recorrido que la existente, ligeramente anclada en los 20 Mbps, por no hablar de los ratios de subida. Nada que ver con los 100 megas que anunció Movistar en un futuro próximo y que, se supone, llegaran a un insuficiente 50% de la población en unos años. Cabe preguntarse qué ocurrirá con la otra mitad, si es que no hay planes para ellos, ya que no son precisamente "cuatro gatos".

Viendo el paso que lleva y lo rápido que se está extendiendo, parece que podemos hablar sin miedo de la explosión de la fibra óptica, tanto en España como fuera de nuestras fronteras. Vodafone ya ha confirmado en varias ocasiones que su objetivo es trabajar con fibra en algunas zonas y complementarlo con sus servicios de Internet móvil. Las cableras tienen desde hace tiempo el mismo camino y han llegado a acuerdos multilaterales para no perder el tren. Los próximos meses van a ser determinantes para fijar el panorama de la nueva banda ancha durante algunos años. No será complicado ver fuera de juego a quien no haga los deberes y, quien sabe, lo mismo entra un jugador nuevo.


Fuente: adslayuda