1. Los padres deben entender cómo funcionan los programas de control parental.
  2. El ordenador debe estar ubicado en una zona común para que el adulto pueda vigilarlo de vez en cuando.
  3. Ayudar a nuestros hijos a crear su cuenta en redes sociales para controlar el grado de privacidad y la política de seguridad existente.
  4. Hay que ser conscientes del peligro que conlleva que un menor quede físicamente con una persona conocida a través de la Red.
  5. Enseñar a los hijos a poner fin a conversaciones incómodas, es decir, aprender a decir “No”.
  6. Enseñar a reconocer spam y correos con contenido inapropiado.
  7. No desactivar el antivirus cuando se juega en línea.
  8. Explicar a nuestros hijos que no todo lo que ven o escuchan en Internet es siempre cierto.
  9. Mantener el equipo actualizado al máximo (solución de seguridad y sistema operativo).
  10. Mucho cuidado con las redes WiFi abiertas de estaciones y aeropuertos, por ejemplo. Y lo mismo con los locutorios y cibercafés. Nunca hacer transferencias bancarias desde estos sitios.


Fuente: muyseguridad