La guerra contra el P2P y las descargas está en la agenda de los políticos europeos. Primero fue Francia quien aprobó la Ley Hadopi y de momento no ha conseguido reducir las descargas a pesar de que los internautas están siendo advertidos y desconectados si usan programas como eMule o BitTorrent. Según un estudio de la Universidad de Rennes han aumentado un 3% las descargas en programas de intercambio en Francia.

Ahora Reino Unido va a seguir los pasos de Sarkozy y según Público, los propietarios de derechos de autor podrán exigir a los ISP que envíen notificaciones a sus usuarios que hayan descargado archivos protegidos. Las entidades de gestión sólo tendrán que facilitar las direcciones IP sospechosas. Además, los operadores tendrán que colaborar para detectar las posibles infracciones.

La industria cultural también podrá pedir listas de infracción de la propiedad intelectual con un informe de descargas por usuario. Con esta información, podrá iniciar una demanda contra él. Un segundo aspecto que contempla la nueva ley británica es la posibilidad de que el regulador de las telecomunicaciones ordene a los proveedores de servicios acciones técnicas contra los usuarios como la reducción de velocidad o la desconexión completa.

Situación en España

El próximo viernes se conocerán más detalles sobre la Ley antidescargas que plantea cultura, pero de momento, no parece que esté inspirada en la ley británica o francesa.


Fuente desde: adslzone