La Comisión Europea ha confirmado que los fabricantes ‘terceros’ de cartuchos de tinta, para impresora, tendrán que cumplir con las regulaciones de desechos electrónicos con que ya cumplen los fabricantes de cartuchos originales. Y que si esto es así –será obligatorio, evidentemente-, tendremos que encontrar el logotipo de WEEE impreso en el propio cuerpo del cartucho de tinta. La clave en todo este asunto está en que los fabricantes ‘terceros’ tendrán que reducir el desperdicio de cartuchos y la creación de residuos. Básicamente, se reutilizarán o reciclarán sus consumibles.

¿Qué cambia? La Comisión Europea modifica la regulación de cartuchos de tinta para impresora

Para el consumidor, ahora sencillamente tendremos que encontrar en el propio cartucha de tinta para impresora un logotipo de la WEEE. Esto implica que el proceso que experimentan estos consumibles es ‘verde’, que se cumplen las normas ambientales. Sean originales o de terceros, siempre y cuando se incluya este logotipo podremos estar seguros de que no se generan residuos sino que se reutilizan o se reciclan las partes correspondientes al consumible. Por lo tanto, como consumidores deberíamos buscar este logotipo, o no comprar el correspondiente cartucho de tinta.

Es algo positivo para el mercado en su conjunto, tanto para los fabricantes como para los consumidores, porque supone una garantía de que se beneficiará al medio ambiente. No obstante, los fabricantes ‘terceros’ demandan que se aplique también otras normas de regulación que les permitan competir de tú a tú con los fabricantes de cartuchos originales. Y los consumidores también, porque en este sector los precios son abusivos en su amplia mayoría, y la competencia es menos abierta que en otros mercados tecnológicos.

 

Fuente: techaradar | adslzone