Su mayor densidad de transistores implica menores temperaturas de trabajo, más rendimiento y menor consumo de energía. Pero no sólo ha evolucionado su proceso de fabricación, acercándose a los chipsets de gama alta, sino que además ahora cuentan con Bluetooth 5.0 en el apartado de conectividad, por ejemplo. Algo que también era exclusivo de la gama alta –hasta ahora-, y llega al peldaño inferior. Por otro lado, llega la GPU Adreno 510 con soporte para la API Vulkan, con un rendimiento un 30% superior en gráficos, con respecto a los chipset anteriores.

Los dos nuevos chipset de Qualcomm comparten su configuración octacore 4x 2,2 GHz + 4x 1,8 GHz. El Snapdragon 660, con 1 MB de caché L2 reduciendo la carga de la memoria RAM LPDDR4.

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Nuevos Snapdragon 660 y 630, la gama media de Qualcomm en 14 nanómetros

El Snapdragon 660 sigue el diseño de cuatro núcleos Kryo 260, con una configuración quadcore hasta 2,2 GHz con 1 MB de caché L2 y quadcore hasta 1,8 GHz con 1 MB de caché L2 también. Una frecuencia de reloj ligeramente aumentada, y con mejor caché L2 para reducir la carga sobre la memoria RAM. Viene además con el nuevo módem LTE X12 y la tecnología HVX para el procesamiento de imágenes con menor ruido, y acompañado por la tecnología QuickCharge 4.0 de carga rápìda junto al soporte para USB Tipo C.

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Por su parte, el Qualcomm Snapdragon 630 cuenta con una configuración octacore también, y el mismo esquema quadcore a 2,2 GHz y quadcore a 1,8 GHz sobre Cortex A53 sin caché L2 y junto a la GPU Adreno 508. Suma igualmente el nuevo módem LTE, el soporte para RAM LPDDR4, USB Tipo C, Bluetooth 5.0, pantallas hasta QXGA y la tecnología Allways-Aware para reducir el consumo de tareas en segundo plano. También se ha dado el salto, en el apartado fotográfico, con el procesador Spectra 160 que soporta configuraciones de doble módulo de cámara con zoom óptico, enfoque automático y efecto bokeh.

 

Fuente: adslzone