Durante el próximo mes de septiembre, a comienzos, se espera que tenga lugar la presentación del Samsung Galaxy Note 4, un dispositivo que, como ya comentábamos, hará realidad la cuarta generación del primer tabletófono con interesantes novedades en hardware y software. Concretamente, Samsung dejará notar la identidad de la compañía en el campo en que es especialista, el software de los teléfonos inteligentes. Y es que, aunque su capa de personalización TouchWiz se considera a menudo “sobrecargada”, cada vez está más optimizada y se convierte en un elemento de utilidad.

Samsung Galaxy Note 4: Hardware para el máximo rendimiento

En el apartado de hardware, las filtraciones que se han producido hasta la fecha nos han dejado ver la práctica totalidad de los componentes que incorporará este dispositivo. Según el país y la variante, nos encontraremos en su núcleo con un chipset Exynos 5433 o un Qualcomm Snapdragon 805, ambos acompañados de 3 GB de memoria RAM como en la generación anterior. Por otra parte, la memoria interna del terminal vendría dada por 32 GB ampliables con tarjeta microSD de hasta 128 GB. Sus módulos de cámara serían de 16 megapíxeles en el caso del trasero y de 3,6 megapíxeles el frontal.

Un año más, enorme pantalla de gran resolución

De nuevo con los aspectos más continuistas del Samsung Galaxy Note 4 con respecto a la generación anterior, la diagonal de su pantalla sería de 5,7 pulgadas, pero la resolución sería aumentada significativamente desde los 1920 x 1080 píxeles hasta los 2560 x 1440 píxeles, como el G3 de LG Electronics. Sin duda, una resolución que corresponde con mayor sentido a una pantalla de semejante diagonal, aunque la diferencia en pulgadas con respecto al Samsung Galaxy S5 quedaría en tan solo 0,6 pulgadas, por lo que la densidad de píxeles será mucho mayor, de 515 píxeles por pulgada. De esta forma, la gama Samsung Galaxy Note se mantendría en la cima del catálogo por pantalla.

Software y sensores, la gran revolución de Samsung

El “as en la manga” que el líder surcoreano en tecnología de consumo tendría guardado para este año con su Samsung Galaxy Note 4, en base a la información que se mantiene actualmente -por el momento no está confirmada oficialmente-, vendría dado por una combinación entre software y hardware mucho más “productiva” que en años anteriores. Si bien es cierto que con el Samsung Galaxy Note 3 y su renovado S-Pen se alcanzó un muy elevado valor del terminal para campos de productividad, este año la firma surcoreana parece que irá aún más lejos gracias a la incorporación de nuevos sensores como, obviamente, los que ya hemos visto en el Samsung Galaxy S5: monitor de ritmo cardíaco y sensor de huellas dactilares.

 

Fuente: adslzone