La operadora de servicios por satélite Quantis ha publicado un interesante estudio sobre el acceso a Internet en España. Con datos de la Secretaria de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información ha coronado a Castilla-La Mancha como Comunidad Autónoma de nuestro país con peor acceso a Internet. Lo preocupante de la situación es que hasta 20.000 habitantes de esta zona no tienen cobertura de acceso a Internet a través de las operadoras convencionales de ADSL, Fibra Óptica o WiMAX.

La parte positiva, intentando buscar algo bueno en las cifras, es que el número de habitantes sin conexión se ha reducido a la mitad respecto al año anterior. Este es el problema de las zonas rurales o de menor densidad de población de nuestro país. La cobertura de las grandes operadoras no supera el 10% en ninguna de estas zonas, donde además de personas, existen numerosas empresas con dificultades para desarrollar su actividad por la ausencia de unas comunicaciones básicas para el negocio.

Por provincias, Guadalajara es donde existen más habitantes desconectados (hasta 7.200) seguida de Cuenca con 6.400 o Toledo con 3.200 personas sin conexión a Internet de banda ancha fija. En relación a los municipios, Casas de Haro (Cuenca) con 884 vecinos, Alcabón (Toledo) con 732 y Santa María del Campo Rus (Cuenca) con cerca de 650 vecinos sin cobertura, se llevan el dudoso honor de liderar el ranking de los “desconectados”.

Las zonas en blanco, un gran problema para España

Según nos cuentan desde Quantis “hay muchos puntos blancos en toda la geografía española. Aún queda mucho por hacer, es importante que los habitantes de las zonas rurales accedan a los mismos servicios que los de zonas urbanas”. Estas zonas “en blanco” son un grave problema dejando a muchas provincias y áreas con una cobertura de conexiones de baja calidad. La España de dos velocidades avanza sin que se esté haciendo demasiado para evitarlo.

Mientras existen ciudades o zonas industriales sin conexión o con conexiones de baja calidad, un 60% de los hogares españoles tienen la posibilidad de navegar por encima de los 60 Mbps. El problema es que la Ley General de Telecomunicaciones promete ofrecer Internet de 10 Mbps en 2017 y de 30 Mbps en 2030. Suponemos que lo harán apoyándose en la banda ancha móvil ya que es complicado pensar que en un año existirá cobertura de banda ancha fija en toda España para ofrecer más de 10 Mbps.

 

Fuente: adslzone