Analizamos la situación del mercado y los distintos escenarios que podría presentar la nueva Vodafone España propiedad de Zegona. De esta forma, podemos anticipar los posibles movimientos de la nueva partida de ajedrez que liderará
Qué cambios podemos esperar en el nuevo Vodafone
Si los clientes actuales del operador rojo temen cambios y jaleos en el servicio prestado por el nuevo operador, pueden respirar tranquilos. Zegona ha confirmado que mantendrá todos los clientes y usuarios en su cartera. Además, el fondo de inversión se ha asegurado la marca Vodafone España para los próximos diez años por lo que no tendrá ni siquiera la necesidad de cambiar de nombre.
Vodafone apenas ha invertido nada en despliegue de fibra los últimos años. así que la venta parcial o total de activos es otra de las posibilidades. Hay que recordar que Vodafone lleva tiempo intentando colocar a un socio parte de su red fija. La actual red de Vodafone, compuesta por accesos de 7,5 millones de hogares con la obsoleta HFC y 3,5 millones con fibra FTTH, podría ser vendida. Por tanto, parte de los actuales clientes podrían no tener una red propia sobre la que navegar, dependiendo de terceros.
La venta de estas infraestructuras podría provocar traspasar clientes a las redes de operadoras rivales como Orange (o como sea que se vaya a llamar tras la fusión con MásMóvil) o Movistar. Con los azules tienen ya un acuerdo que ya firmaron para ampliar la huella de Vodafone a toda la red desplegada por Movistar. Así, los clientes de híbrido de fibra coaxial podrían salir beneficiados del cambio y pasar a usar la fibra simétrica de otro operador, algo que agradecerán si habían perdido la fe en la inversión por parte de Vodafone en FTTH.
Prioritario recuperar clientes de banda ancha
Uno de los grandes objetivos que va a tener la nueva Vodafone es volver a ganar clientes, en especial en el segmento de banda ancha fija. Según los últimos datos publicados en CNMCData, en lo que respecta al operador rojo, sigue desangrándose en un 2023 en el que ya han perdido 145.222 clientes de fibra.
Con estos datos, Vodafone ha sido arrasada en los últimos tres años por Movistar, Orange y hasta MásMóvil en este segmento. Por su parte, Digi amenaza su posición con ya cerca de 1,5 millones de usuarios al cierre de octubre, por los poco más de 2,9 millones clientes de banda ancha de Vodafone.
Así las cosas, la nueva dirección que encabece José Miguel García, ex CEO de Jazztel y Euskaltel, tendrá que definir las líneas para conseguir estos objetivos con los que conseguir mayor rentabilidad. Eso sí, tanto para nuevos clientes como para los ya existentes, no esperemos un nuevo Digi, ya que desde Zegona huyen de comparaciones con el operador de origen rumano o con compañías de bajo coste. Fuentes del sector no parecen confiar mucho en estas afirmaciones y opinan que con el ex de Jazztel y Euskaltel al mando “tendremos un nuevo Digi compitiendo con mayor agresividad comercial”.
Esto se debe a que a Zegona tampoco le interesa que caiga demasiado el ingreso medio por usuario (ARPU) para conseguir cuanto antes rentabilizar la enorme inversión (Disney compró Star Wars por unos 3.125 millones de euros) y tendrá que mantener el estatus de marca premium que empuje al cliente a pagar más.
Fuente: adslzone
