"El proceder de la CMT puede ser incompatible con la normativa sobre telecomunicaciones de la Unión Europea e ir en perjuicio de la competencia y no actuar de incentivo para la inversión en banda ancha". Con esta rotundidad ha argumentado la Comisión Europea la suspensión temporal de los precios mayoristas que Movistar cobra a los operadores alternativos en el mercado de la banda ancha fija.

Precios que obstaculizan la competencia

Los datos en los que se basa la CE son muy claros. Según éstos, la propuesta de regulación impulsada por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones "coloca los precios hasta un 50% por encima de la eficiencia con respecto a los costes". Asimismo, señala que dicha regulación "no se haga de forma transparente de modo que cree barreras artificiales en el mercado".

Bruselas mantiene que la decisión del regulador "disuadiría a los operadores de otros países a comprar acceso a banda ancha mayorista en España". Por este motivo, la considera "un obstáculo" a la hora de desarrollar servicios de telecomunicaciones paneuropeos, uno de los objetivos del Ejecutivo como bien ha demostrado la eliminación del roaming en telefonía móvil a partir del próximo 2014.

Para completar el escrito que la Comisión ha enviado a la CMT planteándole sus "serias dudas", ésta insiste en que "el producto de acceso de banda ancha mayorista es la única oferta regulada en la red de fibra de Telefónica y la CMT no tiene previsto imponer otros aspectos de la competencia, como serían normas más estrictas en lo concerniente a la no discriminación". Con todo ello, ahora el regulador español tiene tres meses para trabajar con el Ejecutivo y el organismo que agrupa a los reguladores europeos de cara a encontrar una solución. En este tiempo, la decisión de la CMT ha quedado suspendida.

 

Fuente: adslzone