El Instituto Geográfico Nacional -en siglas conocido como IGN-, informó sobre el terremoto en cabo de Gata de una magnitud Mw de 5,3. Aunque, uno de los temas que llaman la atención es como el uso de los cables submarinos que están instalados en el mar pueden ser de ayuda para detectar sismos.
La fibra óptica como sensor sísmico
La propia Red Sísmica Nacional ya tiene una nueva línea de investigación en la que se explora la idea de aplicar una novedosa técnica, la cual está basada en la tecnología DAS –Distributed Acoustic Sensing- que sirve para detectar terremotos y hasta el estudio de la estructura de la corteza superficial. Pero, ¿qué permite esta técnica? Básicamente, hace mediciones continuas de las deformaciones que se producen a lo largo de los años a lo largo de un cable de fibra óptica -por tierra-. De esta manera, el extenso cableado de fibra se convierte en una red de sensores que son capaces de detectar movimiento sísmico. Y mide: la tasa de deformación a lo largo de la fibra óptica.
Aunque, también se han realizado experimentos de DAS con cable submarino -realizado en 2020-. Como, por ejemplo, el caso en Valencia a través del cable submarino de la empresa ISLALINK que une Valencia con Palma de Mallorca. Durante dicho experimento, se registraron deformaciones debido a un terremoto en el cabo de palos de magnitud 3,6, a más de 170 km del cable.
Más pruebas con fibra
Y justo esta investigación tiene mucho que ver con el trabajo de un grupo de investigadores del Laboratorio Nacional de Física de Reino Unido. Durante su trabajo, demostraron que estos cables submarinos pueden usarse como una herramienta a nivel global para detectar terremotos en tiempo real -hasta en las profundidades del océano-. Por tanto, ya hay estudios que dejan ver como la fibra óptica, tanto por tierra como por agua, puede ser una solución más para los sismos.
Una de las pruebas fundamentales que realizaron fue a través de un cableado de 5.860 kilómetros entre Southport (Reino Unido) y Halifax (Canadá). Así, lograron detectar señales de terremoto a lo largo del cableado, además de variaciones en las corrientes oceánicas y hasta el fueron capaces de saber el movimiento de las olas.
Por tanto, esta serie de investigaciones y pruebas dejan abierta la puerta a usar esta tecnología -que permite a los usuarios disfrutar de Internet en sus hogares- para ser también una herramienta capaz de observar terremotos, incluso en medio del océano. El propio jefe de sismología en el Servicio Geológico Británico, Brian Baptie, afirmó que: «Nos brinda una oportunidad increíble para observar terremotos en medio del océano a corta distancia. También nos abre la puerta a detectar fenómenos naturales como erupciones volcánicas submarinas o tsunamis en el futuro«, en referencia a los distintos hallazgos tras la investigación.