Cuando hablamos de trackers de descargas torrent se distinguen dos tipos: los públicos, a los que cualquiera puede entrar, buscar y descargar, y que se conectan a toda la red de pares mediante tecnologías como el DHT, o y los trackers privados, servidores cerrados donde solo los usuarios que están dentro pueden bajar los archivos. Y estos se comparten exclusivamente con los demás miembros del trackers, pero nada más.

Estos trackers privados se caracterizan sobre todo por traer contenido de muy alta calidad mucho antes que los demás. Además, al pertenecer a un grupo cerrado de usuarios, con moderadores de contenido, se garantiza que los archivos que se bajan son auténticos y están libres de virus.

Normas más habituales dentro de los trackers privados

Entrar en estos servidores puede ser complicado. Pero mucho más complicado es mantenerse dentro, ya que tienen unas reglas que todo usuario debe cumplir o, de lo contrario, acabarán baneados de por vida del servidor.

Mantener un ratio positivo. A diferencia de los trackers públicos, donde podemos bajar sin miedo a sanciones, los trackers privados nos obligan a tener siempre un ratio de descarga/subida en positivo. Esto quiere decir que hemos subido lo mismo, o más, de lo que hemos descargado. Obviamente, hay torrents que cuentan el doble de subida que de bajada, o que tienen freeleech uy no cuentan como ratio de descarga. Pero, de normal, tenemos que compartir más de lo que bajamos.

Algunos servidores, cuando tenemos un ratio por debajo de 1, nos bloquean las descargas para que intentemos recuperarnos a base de subidas. Pero no se aplica en todos.

No hacer Hit&Run. Cuando bajamos un archivo, este no se puede eliminar al momento de nuestro cliente de descargas, ya que generaríamos un Hit&Run. Y, a los tres, estaríamos baneados automáticamente. Para garantizar el tráfico y la velocidad, se obliga a los usuarios que tengan los archivos compartiéndose un mínimo de días. En algunos servidores, este mínimo son 3 días (72 horas), que no tienen por qué ser seguidas, pero sí estar en un rango de tiempo de, por ejemplo, un par de semanas. Pero en otros, el tiempo de subida mínimo para un torrent puede ser de hasta 14 días, como ocurre con IPtorrents.

Esto garantiza que el resto de usuarios tenga la posibilidad de descargar los archivos de forma más rápida y estable, sin que a ti te genere un prejuicio, por lo que cuanto más tiempo lo tengas, mejor será para el resto, al igual que cuando te toque a ti, te gustará que más gente lo posea.

Otras normas que debes cumplir

Además de lo anterior, este tipo de servidores también tienen otras reglas que tenemos que cumplir para poder seguir descargando sus archivos. Algunas de las más utilizadas son:

  • No utilizar nunca el tracker con ánimo de lucro.
  • Agradecer las descargas a los uploaders. Algunas webs bloquean las descargas a los que tengan un ratio de agradecimientos muy bajo.
  • Prohibido usar multi-cuenta. Si se detectan dos cuentas con una misma IP se banearán a las dos.
  • Nunca entrar por VPN para enmascarar la IP. Si se detecta el uso de una IP es motivo de baneo inmediato.
  • El uso de seedboxes, o VPS, debe ser notificado al tracker.
  • Algunos trackers, como PuntoTorrent, tienen un máximo de copias subidas, por lo que debemos limitar las subidas a un determinado número de copias de un mismo archivo.

Luego, cada servidor torrent puede tener sus propias normas específicas, por lo que debemos leerlas bien antes de empezar a descargar, ya que, pese a no realizar nada malo, obligaciones como la de conectarnos cada X días puede pasársenos por alto, y el día que volvamos a entrar, estar baneados sin motivo aparente. Y, por supuesto, el respeto y la colaboración son siempre pilares básicos de este tipo de servidores.

 

Fuente: adslzone