Además, la capacidad de muchos de nuestros dispositivos de reproducir contenido en resolución 4K, también ha provocado que cada vez haya más contenido disponible en esta calidad para consumir desde las distintas plataformas. Hasta ahí parece que todo va bien, pero ¿qué ocurre si nuestra conexión a Internet no es lo suficientemente potente como para reproducir este tipo de contenidos de forma fluida?.

La respuesta es fácil, aunque contemos con contenido 4K y dispositivos capaces de reproducir en esa calidad, a la hora de reproducirlos en streaming podemos encontrarnos serios problemas por no contar con la infraestructura necesaria. De esta forma, las reproducciones se verán afectadas con continuos parones o incluso podríamos ser incapaces de reproducirlo.

La mayoría de las plataformas informan de las velocidades mínimas con las que tenemos que contar según la calidad del contenido, de ahí, que por ejemplo Netflix indique que para ver contenidos en HD desde su plataforma nos bastará con una conexión ADSL de hasta 20 Mbps. Si cumplimos este requisito no deberíamos tener problemas en ver contenido en esa calidad de forma fluida, no obstante siempre es recomendable realizar un testdevelocidad para asegurarnos de la velocidad que nos llega realmente a casa.

Sin embargo, si lo que queremos es ver contenidos 4K en streaming, Netflix recomienda contar con una conexión que nos ofrezca un mínimo de 25Mbps. Parece que en este caso nos tendremos que ir a las distintas ofertas de fibra óptica, ya que suelen garantizar de 20 Mbps en adelante y así garantizarnos que podremos ver este tipo de contenidos en streaming, es decir sin necesidad de descargarlo previamente, y con total fluidez.

Por lo tanto, cualquier conexión de fibra óptica nos garantizaría poder reproducir contenido 4K en streaming, aunque eso sí, debemos tener especial precaución con los descodificadores de algunas plataformas, ya que en ocasiones puede que tengamos que conectar el portátil al televisor para poder ver estos contenidos en 4K.

Por último, pero no menos importante, otro aspecto a tener en cuenta es la manera que tengamos conectado router y nuestro televisor. En la mayoría de casos se suele utilizar la red WiFi para evitar tener cables por mitad del salón pero lo cierto es que para realizar este tipo de reproducciones lo ideal es usar cable y así evitar desperdiciar ancho de banda o sufrir microcortes por culpa de la WiFi ya que se necesita un flujo de datos constante para este tipo de reproducciones y más en esa calidad.

 

Fuente: adslzone