La PlayStation 4 se lanzó originalmente en 2013 y con un precio de 399 euros, exactamente el mismo que ahora tendrá la PS4 Pro. Por debajo, la PS4 Slim se mantendrá en 299 euron como reemplazo de la versión original que, en cualquier caso, se va a seguir vendiendo hasta agotar stock. En la nueva PS4 Pro nos encontramos con un cuerpo más grande al resto de las versiones, también un peso superior y exactamente el mismo procesador, RAM y casi todo el resto de hardware. ¿Cambios? Potencia gráfica es lo fundamental, que pasa de 1,84 TFLOPs a 4,20 TFLOPs abriendo el soporte para la resolución HDR y el escalado 4K.

Mucha más potencia gráfica en la nueva PS4 Pro

Tanto PS4 Pro como PS4 Slim ofrecen dos novedades importantes: WiFi ac y Bluetooth 4.0 LE de bajo consumo. El primero, para una mayor velocidad de conexión inalámbrica –aunque siempre es preferible el cable-, y el segundo para mejorar la autonomía de dispositivos como el DualShock 4 y otros periféricos que conecten también sin cables. Ahora bien, la PS4 Pro añade a lo anterior un USB 3,0 adicional y, como ya comentábamos, una mejora de gráficos sustancial que nos permitirá jugar en resolución 4K (escalado) y con soporte para el formato HDR en monitores y pantallas compatibles.

¿Es un cambio importante? De momento quizá no, porque llegará sólo con 36 videojuegos de lanzamiento que ‘aprovechen’ esta potencia adicional. Ahora bien, en los próximos meses veremos cómo otros videojuegos aprovechan esta potencia para ofrecer texturas más acertadas, mejores sombras y, en definitiva, una calidad gráfica notablemente superior. Son 100 euros más, así que ir a por ella o a por la PS4 Slim es cuestión de preferencias –y posibles-.

Fuente: adslzone