Nuestros compañeros de Gamerzona se hacen eco del precio de producción que tiene la nueva consola del gigante nipón. En concreto, el total de los componentes de cada unidad valen 381 dólares según IHS, firma especializada en analizar el coste de todo tipo de equipos tecnológicos.

De este modo, sobre el papel, Sony tendría un beneficio neto de 18 dólares en Estados Unidos. Este valor crecería hasta los 118 euros por cada consola vendida en Europa después del precio impuesto por la compañía en nuestro continente en relación a los 281 euros que costaría fabricarla en nuestra divisa.

No obstante, hay que tener en cuenta otros factores muy importantes que encarecen el producto como son los gastos de distribución de PS4 así como las potentes campañas publicitarias en todo el mundo. En este punto no se puede concretar el gasto concreto, pero todo apunta a que el balance en un primer momento por consola vendida podría ser negativo para Sony. Con el paso de los meses la situación se equilibraría y a medio plazo se convertirá en un producto muy rentable, especialmente cuando la compañía logre reducir los costes de producción de su hardware.

En cualquier caso, la firma asiática parece haber aprendido la lección respecto a lo sucedido con PlayStation 3. La consola lanzada en 2006 le generó importantes pérdidas de inicio ya que su valor real estaba en torno a 800 dólares mientras que el precio de venta se situaba en los 600 dólares/euros.

Así pues, Sony parece haber acertado de lleno con un producto que ya ha marcado su primer hito con la venta de 1 millón de unidades en EEUU en sus primeras 24 horas. A priori, parece que se acabará consolidando en el mercado, pero habrá que ver hasta qué punto Microsoft y su Xbox One plantan cara en la denominada batalla de la Next Gen.

Fuente: adslzone