A través de los datos facilitados por el portal VGChartz, el cual toma sus resultados a través de los aportados por la propia industria del videojuego, hemos elaborado un gráfico en el que se comprueba claramente cómo PS Vita no despega en el mercado de las videoconsolas. Las cifras, en las que se toma el número de unidades vendidas a la semana en EEUU, Europa y Japón, no dejan lugar a dudas y a pesar del potencial técnico de la última consola puesta en el mercado por la compañía nipona, los usuarios no le encuentran interés.
En concreto hemos elaborado la gráfica a partir de la semana que concluyó el 6 de abril. Por entonces ya se percibían las amplias distancias entre las dos portátiles del gigante japonés. En dicha semana PSP alcanzó las 62.500 unidades vendidas en todo el mundo, mientras que su sucesora se quedaba en las 41.700 unidades. Un mes más tarde la distancia se reduce, al reducirse las ventas de PSP hasta las 55.800 unidades y verse aumentadas las de la última portátil hasta rozar las 50.000.
Posteriormente la brecha vuelve a abrirse manteniéndose a una distancia de alrededor de las 20.000 unidades más cada semana por parte de PSP respecto a PS Vita. Solo en una semana en el segundo trimestre del año, de forma excepcional, fue capaz PSV de conseguir vender más que su predecesora, la cual recordemos llegó al mercado en diciembre de 2004 y meses más tarde al resto de territorios. En dicha semana, cerrada el 29 de junio, la última portátil alcanzó las 59.500 consolas vendidas mientras la primera portátil de la firma asiática se quedó en 51.400 unidades.
Los datos son muy evidentes y responden a una tendencia que se justifica en la escasa demanda de la consola estrenada en nuestro continente en febrero de 2012. El alto precio de la misma y el frágil catálogo de títulos atractivos y económicos para los usuarios han dado lugar a que los usuarios opten por comprar la portátil antigua en lugar de optar por la de última generación a pesar de su mayor potencia.
Las cifras globales recogidas en dicha web confirman el pobre balance de Vita. Hasta la última semana auditada (la del 6 de julio), apenas se alcanzaron los 5,3 millones de consolas vendidas. Los datos contrastan con la buena acogida que tuvo su antecesora en su primer año, ya que dobló las que hasta ahora ha tenido PSV, aunque el contexto era bien distinto ya que no encontró la competencia que ahora existe con los smartphones y las tabletas.
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