Todos los nuevos dispositivos de Internet de las Cosas (IoT) que se conectan a la red, a pesar de sus apariencias robustas, son realmente muy sensibles a los ataques de los ciberdelincuentes. Si los fabricantes no trabajan por seguir unos protocolos de ciberseguridad exhaustivos los peligros se incrementarán notoriamente.

Todo pasa por asegurar los extremos de los canales de la red (los endpoints) mediante la sincronización el firewall para desencriptar y analizar el tráfico, así como proteger las credenciales de cada dispositivo, ya que cada vez hay más en la red y por ende la seguridad se ve afectada.

A pesar de las grandes innovaciones que presenta y de la experiencia única que supone para el usuario la realidad aumentada/realidad virtual (RA/V), hay un riesgo latente en el metaverso; la seguridad. Una seguridad que va relacionada con la vulnerabilidad que adquiere el jugador ante este nuevo fenómeno y que le puede crear adicción o ser sometido a abusos por parte de las grandes compañías. A esto se le suma la falta de protocolos de ciberseguridad que garanticen nuestra protección y privacidad en todo momento ante los hackers.

El metaverso es un mundo fascinante, pero ya no tan desconocido para los usuarios, especialmente desde que Marc Zuckerberg cambiase el nombre de su red social Facebook por ‘Meta’.

En el metaverso se incluye un amplio catálogo de nuevos dispositivos tecnológicos asociados a la realidad virtual, como cascos, gafas, asientos, cintas para desplazarse y trajes especiales. Antes de finales de año, se prevé que las ventas de hardware asociado asciendan hasta los 10.000 millones de dólares. Sin ir más lejos, el portal de estadística alemán Statista anunció que en 2023 se venderán más de 26 millones de cascos y gafas, alcanzándose el billón de dólares en ingresos totales de cara a 2030.

El metaverso crece, los peligros también

Sin lugar a dudas, el concepto de metaverso ha avanzado a pasos agigantados, aunque no tanto en materia de ciberseguridad como se esperaba. Las grandes empresas como Facebook/Meta y Microsoft/AltspaceVR, así como otros gigantes del sector de los videojuegos, están explorando este mundo para diseñar nuevos mercados lucrativos, espacios llamativos y viajes interactivos que otorguen una experiencia única a los usuarios.

De hecho, y según datos de la consultora McKinsey, en 2022 se habrán invertido 120.000 millones de dólares en el metaverso, viéndose incrementada esta cifra hasta los 5 billones de dólares de cara a 2030.

La red de ordenadores y servicios no para de crecer, los usuarios buscan mejores dispositivos y las empresas ofrecerles unas mejores experiencias en RA/RV, pero siempre con una conexión a internet eficiente y veloz. No obstante, todo ello supone una serie de riesgos en materia de ciberseguridad que no siempre se tienen en cuenta en un universo por descubrir como es el metaverso y de lo que se aprovechan los ciberdelincuentes.

SonicWall, se presenta como una alternativa para ofrecer seguridad cibernética ilimitada en esta era hiperdistribuida que nos encontramos en el mundo laboral, donde los dispositivos son remotos y para nada seguros.

 

Fuente: muyseguridad