Este posible aumento en el uso de Opera no sería casual, ya que desde hace tiempo incorpora de forma integrada un servicio de VPN que permite disfrazar la IP del usuario, volviendo anónima su navegación y cifrando los datos transmitidos a través de los sitios web. Esto permite en el caso de los estadounidenses evitar que las ISP puedan registrar su actividad online.

Según Opera Software, empresa encargada del navegador, “el número de usuarios diarios de Opera en Estados Unidos es más del doble desde que el Congreso decidió derogar ciertas protecciones de privacidad en Internet”, mostrando además un gráfico en el que se ve un aumento del 109 por ciento en la cantidad de usuarios estadounidenses.

opera-growth-us

La empresa no ha dudado en remar a su favor tras dar a conocer estos datos, haciendo hincapié en que ofrece de forma “integrada un servicio de VPN gratuito y sin registro en el navegador para que todo el mundo, y no solo los expertos, tenga una herramienta simple para proteger la privacidad.”

Los servicios de VPN se han convertido en un tema de moda en Estados Unidos desde el 28 de marzo, cuando la Cámara de los Representantes siguió al Senado en la derogación de las normas sobre privacidad que la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) aprobó el año pasado. Este cambio legislativo permitirá a las ISP vender datos de los usuarios, incluyendo el historial de navegación, localización e incluso las aplicaciones usadas, todo eso sin necesidad de ningún consentimiento.

Sin embargo, la euforia de Opera contrasta con los datos extraídos por StatCounter. La empresa de mediciones ha estimado que la cuota total del navegador está por debajo del 0,80%, habiendo subido del 0,74% al 0,76% hace dos semanas. Esto choca frontalmente con lo publicado por Opera, aunque por otro lado, no son pocas las voces que ponen en duda la fiabilidad de las empresas de medición.

 

Fuente: ComputerWorld | muyseguridad