Desde la irrupción del smartphone en nuestro día a día, la cantidad de aplicaciones que tenemos a nuestra disposición no ha dejado de crecer. Tanto es así que muchas veces optamos por descargar algunas de ellas e, incluso, llegamos a olvidar probar su funcionamiento. Con el impacto que ello puede llegar a tener en nuestro terminal. A medida que acumulamos más aplicaciones, nuestro smartphone se ve obligado a tener que dedicar recursos a las mismas, incluso cuando no las utilizamos, puesto que muchas de ellas se quedan en segundo plano. El resultado es que nuestro teléfono se vuelve más lento que de normal.

Cuando nos encontramos ante esta situación, una de las soluciones más habituales consiste en reiniciar nuestro terminal para tratar de limpiar todos los procesos que pueden haberse quedado atascados. Pero en muchos casos esto no es suficiente y pasadas apenas unas horas, volvemos a sufrir el mismo problema. Para conocer si realmente su origen es consecuencia de las últimas descargas que hemos llevado a cabo, Android nos lo pone fácil. Te enseñamos a utilizar el modo seguro. 

Limita las últimas descargas con el modo seguro

El modo seguro de Android es un recurso de este sistema operativo que nos permite identificar si alguna de las últimas apps descargadas es la culpable del mal rendimiento de nuestro terminal. Activándolo, nuestro teléfono móvil únicamente va a permitir que se ejecuten las aplicaciones que son básicas para el sistema. Es decir, todas aquellas que estaban presentes el mismo día que compramos el terminal. 

En el caso de que, una vez reiniciado el dispositivo, observemos un notable cambio en su rendimiento, sabremos que el problema de rendimiento está relacionado con una de las últimas aplicaciones que hemos descargado. De este modo, podremos desinstalar todas las últimas descargas con el objetivo de mejorar la velocidad del mismo.

Cómo se activa el modo seguro

Tenemos dos vías para activar el modo seguro, en función de si tenemos el teléfono encendido o apagado. En el primer caso, tenemos que mantener pulsado el botón de apagar el móvil y esperar unos pocos segundos. Acto seguido, tendremos un menú de opciones: apagar, reiniciar o realizar una captura de pantalla. Si hacemos una pulsación prolongada sobre el botón de apagar, aparecerá una ventaja emergente con un mensaje que nos proporcionará información sobre el reinicio en modo seguro. Debemos aceptar todo lo que dice este mensaje y, segundos más tarde, comenzará todo el proceso.

En el caso de que esté apagado, tenemos que encender el terminal con normalidad. Pero, una vez se ve la animación de inicio de Android, debemos mantener pulsado el botón de bajar el volumen. En este caso, no aparecerá ningún mensaje. Cuando se inicie, lo hará ya con este modo activado. 

En ambos casos, vamos a comprobar como la pantalla de inicio aparece con todos los iconos de las aplicaciones que no son nativas en un color gris. Que nos señalará que no podremos interactuar con ellos. Si notamos como el rendimiento mejora bastante, es el momento de proceder a la desinstalación de aquellas que no sean imprescindibles.

 

Fuente: adslzone