Italia ha declarado la guerra a la Inteligencia Artificial, al prohibir la herramienta de chatbot de inteligencia artificial ChatGPT, creada por OpenAI, por supuesta «recopilación ilegal de datos personales». Esta medida ha causado un gran revuelo en la comunidad de la IA, y ha llevado a muchos a preguntarse si otros países podrían seguir su ejemplo y prohibir el uso de la IA en diversas áreas. La decisión de Italia se suma a la creciente preocupación por la privacidad y seguridad de los datos personales en la era digital, y podría tener implicaciones importantes para el futuro de la IA en todo el mundo.
Trato ilegal de datos personales
El GPDP acusó a la empresa de recopilar de manera ilegal los datos personales de los usuarios italianos y ordenó a la compañía que detuviera inmediatamente la compilación hasta que modificara sus prácticas.
En su comunicado de prensa, el GPDP declaró que la empresa no tenía justificación legal para la recopilación de información personal de los usuarios italianos. Además, afirmó que OpenAI no tenía un mecanismo para impedir que los usuarios menores de edad accedieran al servicio, lo que podría exponerlos a respuestas inapropiadas para su edad y grado de desarrollo.
En la actualidad, a pesar de la prohibición, todavía es posible acceder a ChatGPT desde Italia utilizando una redirección de tráfico VPN a través de Milán. Se espera que OpenAI no sea inmediato en su castigo y tarde tiempo en cumplir con la orden de detener la recopilación de datos de los usuarios italianos.
La empresa tiene un plazo de 20 días para informar al regulador de las medidas que ha tomado para cumplir con los requisitos de privacidad de los usuarios. Si no cumple con la orden del GPDP, se enfrenta a multas de hasta 20 millones de euros o el 4% de su facturación global anual.
Casos anteriores
Esta no es la primera vez que el regulador de privacidad italiano ha tomado medidas similares contra un chatbot de IA. En febrero, el GPDP prohibió la aplicación de chatbot Replika.ai, que se ha vuelto conocido por las relaciones personales que algunos usuarios desarrollan con su chatbot. Muchos usuarios expresaron su angustia después de que la compañía eliminara recientemente la opción de juegos de rol eróticos.
El regulador alegó que la empresa carecía de una justificación legal para recopilar información personal de los usuarios y que no tenía mecanismos para impedir que los menores de edad accedieran a la aplicación. La prohibición de Replika.ai es una señal más de la creciente preocupación en Italia y en todo el mundo sobre la privacidad y seguridad de los datos personales en la era digital.
