Toda la polémica surgió en abril de este año, cuando Bloomberg desveló que Amazon tiene a miles de trabajadores escuchando y transcribiendo lo que los usuarios preguntan al asistente, pudiendo escuchar información confidencial y vulnerando nuestra privacidad. En las últimas semanas también se ha confirmado que Apple y Google lo hacen. Las compañías afirman que estas escuchas eran anónimas, pero había algunos datos que permitían identificar a los dueños.

Apple deja de escuchar las grabaciones de Siri, y pedirá permiso para hacerlo

Por ello, han sido Apple y Google las primeras en mover ficha. Apple ha dicho que va a suspender todas las escuchas de grabaciones de Siri en todo el mundo tras conocerse que empresas externas contratadas por Apple estaban escuchando grabaciones del asistente para mejorar su precisión. Varios trabajadores de esas empresas confesaron a The Guardian que habían escuchado conversaciones que contenían información médica, intercambios de droga, o a parejas haciendo el amor; y en todos esos casos en forma de activaciones involuntarias.

Lo que Apple hará será que, en una próxima actualización de software, solicitará el permiso de los usuarios para participar en este «programa de mejora de producto», ya que ninguna de las tres compañías pedía permiso para participar en este programa de escuchas anónimas, y las únicas menciones que se hacían eran que «algunas solicitudes de Siri podían ser usadas como parte de un control de calidad», aunque sin especificar que esas escuchas eran llevadas a cabo por humanos.

Apple afirma que el objetivo de escuchar las grabaciones es para puntuar la precisión del asistente para saber si ha sido llamado por error, y si la respuesta fue adecuada. En el caso de la compañía, las transcripciones no estaban asociadas a ningún Apple ID para hacerlas anónimas. En total, algo menos del 1% de las grabaciones diarias de Siri son escuchadas.

Google dejará de escuchar las grabaciones durante 3 meses en la UE

Google también ha anunciado también que va a dejar de escuchar y transcribir las grabaciones de Google Assistant en la UE durante los próximos tres meses. En el caso de Google, los trabajadores reconocieron escuchas sensibles relacionadas con direcciones o información médica que permitía identificar a quienes estaban hablando.

Las compañías no han tenido más remedio que dejar de llevar a cabo las escuchas en la forma que lo estaban haciendo hasta ahora con una tecnología que todavía tiene mucho margen de mejora. Por ello, ahora deberán ser más transparentes con todo el proceso, y sobre todo cumplir con la RGPD.

 

Fuente: TNW | adslzone