Aunque utilizar una cuenta de Outlook como cuenta del sistema es práctico y útil, muchos usuarios prefieren hacer gestionar sus cuentas de forma local, es decir, como en Windows 7 y las versiones anteriores del sistema operativo a modo de cuenta del sistema, pero sin integrarse con la plataforma de la nube.

Cuando instalamos Windows 10 la cuenta que nos configura es vinculada a Outlook, aunque podemos elegir la opción de configurar en su lugar una cuenta local desvinculada de esta plataforma online. Igualmente dentro del propio sistema operativo muchas veces Windows intentará vincular nuestra cuenta local a una cuenta de Microsoft, incluso aunque no queramos hacerlo.

El colmo de todo viene cuando un usuario con cuenta local inicia sesión en la Windows Store. Cuando esto ocurre el propio sistema operativo convierte la cuenta automáticamente y sin preguntar en una cuenta de Microsoft, dejando al usuario sin su cuenta local y teniendo que autenticarse con los credenciales de Outlook cada vez que intente iniciar sesión.

Por suerte este proceso es reversible, es decir, podemos volver atrás y volver a convertir nuestra cuenta de Microsoft en una cuenta local de nuestro sistema. El proceso es sencillo.

Lo primero que debemos hacer es acceder al menú de Configuración > Cuentas de nuestro Windows 10.

Aquí veremos un resumen con toda la información relacionada con nuestra cuenta de Microsoft. Veremos que uno de los apartados que nos aparece es el de “Iniciar sesión con una cuenta local”. Pulsamos sobre él.

Windows 10 nos informará del proceso y nos pedirá que demostremos que realmente somos nosotros.

En el siguiente paso el sistema operativo nos pedirá el nombre de usuario y la contraseña que queremos asociar a nuestra nueva cuenta local. Si estábamos contentos con el que configuramos la primera vez podemos mantenerlo sin problemas.

Listo. Windows nos indicará que el proceso se ha completado con éxito y que vamos a mantener nuestro usuario tal cual lo tenemos pero sin vincularlo con la cuenta de Microsoft. Lo único que nos queda por hacer es cerrar la sesión y volver a iniciarla ya con nuestra cuenta de usuario local, sin los datos de la Outlook.

Es posible que algunas aplicaciones pidan iniciar sesión paran funcionar correctamente, sin embargo otras como la Store funcionarán sin problemas mientras hayamos iniciado previamente.

 

Fuente: softzone