La segmentación es un problema que afecta al sistema operativo móvil Android y los dispositivos compatibles desde el principio de sus tiempos, prácticamente. Y es que Apple, que desarrolla el homólogo iOS, sólo distribuye su software para un hardware muy limitado distribuido también por ellos mismos. Los iPhone, iPod y iPad -sólo algunos modelos- son lo único que Apple tiene que tener en mente cuando se plantea el desarrollo de una nueva versión de su sistema operativo móvil, iOS. Por su parte, Google debe contemplar, en el desarrollo de nuevas versiones de Android, un espectro mucho más amplio de dispositivos y componentes de hardware con que hacer compatible su software.

Google no ha dado la talla con sus dispositivos Nexus

Aunque es importante tener en cuenta lo anterior, si nos limitamos únicamente a lo ocurrido con los dispositivos de la familia Nexus, Google no ha conseguido dar la talla con su actualización a Android 5.0 Lollipop. Y es que, aunque era anunciada la actualización el pasado día 12 de noviembre, hoy mismo ha comenzado el despliegue escalonado, lo que significa que aún tardará varias semanas en estar disponible para todos los usuarios de dispositivos Nexus compatibles con Android 5.0 Lollipop en el mundo. En este sentido, es necesario recordar que Apple programa el despliegue de sus actualizaciones para dispositivos móviles en un día concreto y, a partir de una determinada hora, comienza para todos al mismo tiempo.

Lo cierto es que, recordando el método de Apple con respecto a su sistema operativo móvil iOS y su despliegue, dada la estrategia que ejecutan se producen todo tipo de contratiempos como fallos en los servidores y muy largos tiempos de espera, así como descargas exageradamente lentas, o incluso la imposibilidad de acceder a la actualización durante varias horas. Ahora bien, salvando estos problemas, lo cierto es que en 24 horas desde que es lanzada la actualización, todos los usuarios pueden tenerla ya instalada en sus dispositivos móviles.

El resto tardarán aún más, o no…

Hasta la llegada de Android 5.0 Lollipop, la historia ha sido siempre igual. Cada nueva actualización del sistema operativo móvil Android que ha llegado ha sido instalada, en primer lugar, en los dispositivos de la familia Nexus y, posteriormente, en los teléfonos inteligentes de última generación, teniendo evidente prioridad los de gama alta. Aunque se esperaba que una vez más esto volviera a ocurrir así, y por tanto contábamos con que los primeros en actualizar tuvieran un margen de 90 días desde la llegada de Android 5.0 Lollipop -como en anteriores ocasiones-, lo cierto es que Motorola ha revolucionado el ritmo de actualizaciones.

Pero no han sido los únicos, sino que LG, con su teléfono inteligente de referencia actual, también ha conseguido marcar un tiempo récord y, tal y como anunciaron la semana pasada, el LG G3 recibirá la actualización de firmware correspondiente a Android 5.0 Lollipop a lo largo de esta misma semana. Sin duda, aunque no dejamos de alegrarnos por la determinación de estos dos fabricantes, no deja de ser llamativo que, al mismo tiempo que algunos fabricantes han reaccionado ante sus errores en el pasado, Google haya empeorado en un aspecto en el que era sobresaliente: el despliegue de sus actualizaciones OTA -Over The Air-.

¿La solución? Instalar Android 5.0 Lollipop de forma manual

Mientras cientos de usuarios del Nexus 5 y otros terminales de la misma familia esperan a que llegue de forma automática la actualización vía OTA, la única solución que tenemos por el momento es actualizar de forma manual. El problema es evidente, y es que no todos los usuarios tienen los conocimientos necesarios para hacerlo, por lo que aún habrá muchos que se queden sin actualizar hasta que, definitivamente, termine el despliegue escalado de Android 5.0 Lollipop.

 

Fuente: adslzone